La nostalgia, un ingrediente del pan de pascua para venderlo

Atender nichos de mercado es una de las estrategias que ayudan a subir las ventas. Este año las panaderías apuntan a los migrantes ecuatorianos que en diciembre visitan a la familia, y los instan a llevar el pan de pascua de su tierra como regalo.

En el caso de la panadería Erick, ofrecen unas latas que tienen paisajes de la Costa, Sierra, Oriente y de las islas Galápagos, para estimular a los migrantes a comprar y llevar el producto a la tierra que ahora los acoja.

“Mandamos a hacer las latas con paisajes ecuatorianos justamente para que los migrantes lleven allí el pan de pascua. A nuestra panadería vienen los viajeros que llevan el pan de aquí al exterior”, manifestó a Diario EXPRESO Wilson Flores, propietario de la panadería Erick.

Otros, como Pacari, usan como paraguas la fama internacional de la marca.

“Nuestro chocolate ha recibido premios internacionales, nuestros productos son un orgullo de los ecuatorianos en el exterior y sabemos que los migrantes al visitar Ecuador llevan el pan de pascua con chocolate. Al migrante le gusta presumir de los sabores y productos de su tierra”, indicó Santiago Peralta, fundador de Pacari.

Tanto Peralta como Flores consideran que en este caso, el principal ingrediente es la nostalgia.

Hay negocios que han firmado alianzas, como por ejemplo Moderna con Manicho, que es un producto nostálgico de Ecuador, lo que vuelve atractivo llevar el dulce con las características de este tipo de chocolate.

En esa búsqueda de atender a sectores específicos, el local Prot Inn optó por clientes que por lo general no pueden consumir azúcar ni harina refinadas, como por ejemplo los pacientes de diabetes. Por ello su fundador, David Pareja, ofrece un pan elaborado con harina de almendra, con frutos secos y sin azúcar.

“Cada vez hay más personas que cuidan su salud, pero esto no implica que no puedan disfrutar de un pan de pascua o de una galleta de Navidad junto con una taza de chocolate. Nuestro concepto tiene sus seguidores y por eso en cinco años tenemos nueve locales y para el próximo año vamos a abrir tres más”, anunció Pareja.

Agregó que tienen tres meses de haber abierto una sucursal en el centro comercial Plaza Lagos, en la vía a Samborondón.

Pareja destacó que ocho de sus locales son amigables con las mascotas, por lo que los clientes disfrutan de compartir una salida con amigos y sus perros. “El único lugar al que no se puede llevar a la mascota es el local ubicado en Plaza Lagos, pero allí tenemos a Jabalo, que es amigable con todos los clientes”, explicó Pareja.

Los precios de los panes de pascua oscilan entre los 4,50 y 15 dólares. La diferencia radica en qué panadería se compra y si el producto es gourmet o no.

En la oferta también participan los supermercados, con sus propias estrategias. Por ejemplo Megamaxi, además de panecillos de pascua, también ofrece figuras de chocolate, huevos de pascua y galletas. Tía y Mi Comisariato también se suman a la venta de estos panes.

Es común acompañar este dulce con una taza de chocolate caliente. Para ello, hay bombas que se ponen en la taza con agua caliente y el deleite es ver cómo se derriten. “Esas bombas decoradas tienen por dentro masmelos”, indicó Flores.

Las cuatro bombas para el chocolate cuestan 12 dólares y vienen en un recipiente decorado para entregarlo como regalo. Según Flores, se compra mucho para entregarlo en las celebraciones de intercambio de regalos.

En las panaderías también se está ofreciendo el rompope clásico y el de chocolate, cuya botella de 750 mililitros se vende desde los 12 dólares.

En forma general, los dueños de panaderías estiman que la venta de panes de pascua y dulces navideños crecerá entre un 20 y 30 % este año en relación a diciembre de 2021.