La oferta de ropa nacional sin temor a competir contra los Goliat
Con estrategias, los emprendimientos locales encaran a las grandes cadenas internacionales. La importación de prendas creció 38 % hasta julio
Las marcas internacionales de ropa que están en Ecuador se multiplican, con la apertura de sucursales de firmas como Zara, H&M, Victoria’s Secret, etc. Un éxito que se evidencia en el crecimiento de las importaciones, que hasta julio de este año aumentaron un 38 % en comparación con el mismo período 2022, según cifras de la Asociación de Industrias Textiles del Ecuador (AITE).
El imperio textil que seduce a la región: Gamarra
Leer másPero una mayor presencia de marcas extranjeras no espanta a los emprendedores locales, que abren sus propias tiendas con sus marcas; ni limita el crecimiento de tiendas nacionales como De Prati, Etafashion, RM, etc. He aquí una radiografía del sector de prendas de vestir en Ecuador.
Hay mercados para todos y por eso nacen nuevas marcas como Distrito 5, un almacén que nació en pandemia 100 % virtual y ahora tiene tiendas físicas en Quito y Guayaquil. Los dueños son cuatro hermanos. La primera tienda física la abrieron en Quito en 2022 y en septiembre de este año inauguraron el local en Guayaquil. “En la actualidad, nuestras ventas físicas representan un 70 % del total de la facturación”, señaló Estefanía Torres, gerente de compras de la firma.
El emprendimiento nació con una inversión de 9.000 dólares y en poco tiempo ha logrado inyectar más dinero. La apertura de la tienda en Guayaquil costó más de 170.000 dólares y ahora estudian abrir un local en Cuenca y en otras ciudades de Ecuador.
Estefanía, antes de abrir su propia tienda, era proveedora de una de las cadenas nacionales y sus hermanos la animaron a crear la marca Distrito 5. Lo primero que hizo fue crear una comunidad en las redes sociales, y este grupo les permitió entender que son pequeños como el David de la historia bíblica, pero con suficientes fortalezas como para no temer a Goliat, las grandes marcas extranjeras. “Somos diferentes porque confeccionamos ropa de calidad, para cuerpos latinos. En nuestras redes explicamos cómo combinar los colores de la ropa, vendemos la experiencia de usar esa blusa en diferentes lugares. No nos enfocamos en promocionar solo la prenda de vestir”, aclaró.
Para ella, la calidad de confección en Ecuador es alta y puede competir a nivel internacional. Esta visión también la tiene una tienda ícono del país, De Prati, que desde 2014 inició el programa Mujeres Confeccionistas, en alianza con la Fundación Acción Solidaria.
A la fecha, Mujeres Confeccionistas ha brindado en total 520 horas de capacitación a más de 1.100 mujeres, a través de sus varios módulos educativos. Estas capacitaciones no solo les han permitido a las participantes adquirir destrezas técnicas, sino también generar una transformación integral en sus vidas.
LEA TAMBIÉN (Una muestra gastronómica fusiona el sabor ecuatoriano con el mediterráneo)
A esto hay que sumar las academias de confección y diseño de ropa que han crecido y las decenas de negocios virtuales de ropa hecha en el país que se ofertan en las redes sociales.
Desde el gremio se analiza la competencia que hay entre las marcas nacionales y las extranjeras. “El hecho de que ingresen a Ecuador marcas como Zara, H&M, Forever 21, Old Navy, Bas Basic & Simple, etc. significa que hay mercado y habría más si las autoridades controlaran los ingresos ilegales de las prendas de vestir. Pero paralelamente hay marcas nacionales que buscan sobresalir y lo logran por calidad”, dijo a EXPRESO Camilo Ontaneda, director ejecutivo de AITE.
Agregó que lo más difícil es competir con cadenas que tienen una producción al por mayor y cuentan con una estructura que les permite bajar precios. La diferencia con las marcas locales es que las extranjeras ofrecen un ‘fast fashion’, una moda rápida y desechable. “Lo que se confecciona en Ecuador es ropa para que dure varios años y esto es un valor agregado versus el ‘fast fashion’ que vive el mundo. Y esta es la oportunidad que tienen las prendas locales”, destacó Ontaneda.
El ‘boom’ de la viralidad en la moda
Leer másEn forma general las ventas locales (que incluyen ropa y telas) han crecido, pero todavía no alcanzan las cifras del 2019. En el 2022 faltó un 5,7 % para igualar al año prepandemia.
El mercado sí resiste que ingresen nuevos actores, siempre y cuando sean legales, porque lo que más afecta al sector es el contrabando y la subvaloración.
De enero a julio de 2023, las ventas locales suman 435,3 millones de dólares. El crecimiento es del 2,2 % en comparación con el mismo período de 2022.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!