“Los pagos por el uso musical son un asalto para la hotelería”
El presidente de la Asociación Hotelera del Ecuador, gremio que representa a más de 600 hoteles del país, habla sobre las falencias que, a su parecer, las sociedades de gestión colectiva tienen en sus procesos de cobro.
El cobro por la difusión musical está envuelto en un sistema que genera confusión y sospechas. El método y la vía de recaudación instaurados hace 47 años ponen bajo la lupa a las Sociedades de Gestión Colectiva. André Obiol, representante de los hoteleros, se refiere a sus falencias.
El cobro por la música, un sistema que genera confusión y sospechas
Leer más- Desde el Senadi se asegura que esta resistencia de pago viene de la falta de cultura que existe en el país de reconocer el derecho de cobro de los autores.
- Si nosotros entendiéramos a dónde se está yendo ese dinero, cómo se está distribuyendo, a quién se está pagando, y tuviéramos la certeza de que eso está yendo a los artistas, encantados de la vida; pero ese no es el caso.
- Una de las más grandes confusiones es creer que estas entidades cobran por lo mismo. Lo cierto es que cada una agremia a diferentes actores y cobra por diferentes conceptos.
- Existen tantas Sociedades que, sí, generan una confusión y es una molestia que año a año vengan a tocarnos las puertas. No para socializar un proyecto, sino para vía amenaza dar órdenes de pago y clausura. ¿Dónde está el tema de enterarnos de qué hacen, a quién apoyan, dónde están los presupuestos de ellos? Si representan de manera pública a alguien, deberían ser transparentes en ese sentido, mostrar sus resultados, rendir cuentas también.
- Las autoridades aseguran que la gente no está consciente de que los bienes inmateriales tienen un valor. ¿Ha fallado la difusión?
- Estoy de acuerdo con eso, no lo tenemos bien claro, pero por culpa de ellos mismos, que nunca han venido a socializar el tema y decirnos cómo opera cada gestión. Ha faltado difusión, obvio que sí. Imaginemos que vienes a comprar una moto. Yo te explico las características, los beneficios, la calidad y te doy un precio; obviamente tú decides. Pero si te digo: te vendo una moto y tú me preguntas detalles, pero yo te digo que no te puedo decir, ¿la comprarías? Cuando tú no sabes qué compras ni para qué lo compras, el precio siempre te va a parecer alto.
- ¿Qué hay con los convenios que se firman? ¿No es esa una salida?
- Sí, hoy por hoy tenemos convenios firmados con Sayce, Soprofon y Egeda, pero para mí estos convenios son la firma de un buen divorcio, en la que te ponen la pistola en la cabeza para que aceptes bajo ciertas condiciones. Y nos toca hacerlo, porque es la única manera de que nos cobren menos de lo que pretenden cobrar.
- ¿Se han sentado con ustedes a revisar la tarifa?
- Hay convenios de tarifas reducidas, pero no se revisan los parámetros bajo los cuales estas se calculan. Ellos tienen unidades de medida, como la del pago por televisores, pero no toman en cuenta que la tecnología está cambiando. Los que se hospedan ya no ven televisión nacional, tienen Netflix en su computadora y por ello están pidiendo cada vez más que las habitaciones tengan smart TV para directamente conectarse a sistemas de streaming. Lo mismo sucede con la música. Existe Spotify. Todos tenemos música bajada en nuestro teléfono. Estos cobros son un asalto a la hotelería, son un asalto al turismo y es un aprovechamiento de gente mediocre.
- Sé que una de las molestias es que se cobre por la presunción del consumo de la música. Senadi alega que hay normas que facultan el cobro por el potencial consumo.
- Ok, tienen el poder a su lado, la ley les beneficia, pero eso no quiere decir que no podamos hallar mecanismos. Nosotros pagamos por habitación, ojo, esté ocupada o no esté ocupada, pero eso es algo que nos gustaría que se modifique, al menos debería ser con base en la ocupación.
- ¿Existe el temor de que se estén recaudando recursos y que estos recursos se estén desviando?
No sé si temor, pero para mí es la principal sospecha porque no nos comentan qué están haciendo. Señores, queremos pagarles, pero queremos entender primero qué hacen.