El plan de ajustar los subsidios a los combustibles es moderado
Con medidas gubernamentales, se busca ahorrar $ 400 millones entre 2020 y 2021, focalizando el beneficio. La meta original era $ 1.500 millones al año
Objetivos menos ambiciosos. El Gobierno se ha trazado metas conservadoras sobre la reducción de los subsidios a los combustibles en los próximos años.
El plan para 2020 es ahorrar unos $ 200 millones ajustando el beneficio, un monto equivalente al 0,2 % del Producto Interno Bruto (PIB) en el próximo año, a través de medidas gubernamentales, según los objetivos actualizados del programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La meta es similar para 2021.
A esos rubros, se suman cifras de ahorro que dependen de una expectativa de precio del petróleo menor en el mercado internacional en los dos próximos años, lo cual empujaría a la baja el gasto en importación de combustibles del Gobierno.
Los $ 1.500 millones anuales de ahorro que se pretendía tras la eliminación total de los subsidios a los combustibles de octubre pasado quedó diluida. Ahora, incluso la cifra es inferior a los $ 657 millones previstos en ahorro para el próximo año, según a la proforma 2020. Todo apuntaba a una revisión en el costo de la gasolina extra.
Tras las violentas protestas que generó la medida, el FMI y el Gobierno ahora buscan ser más cautelosos. El organismo señala que futuras decisiones políticas en ese ámbito han sido y seguirán siendo diseñadas a través de mecanismos que ayudan a construir un consenso para no afectar a los pobres y vulnerables.
¿Cómo avanza el proceso de focalización de subsidios y las mesas de diálogo para definir el tema? En días pasados, el presidente de la República, Lenín Moreno, aseguró que entre febrero y abril de 2020 estarían aplicándolo. “No volveremos a tomar una decisión mientras no estemos claros de que la focalización afecta a quienes debe afectar y no a los que más necesitan”, dijo el jefe de Estado.
El primer mandatario no descartó que en la focalización se incluya al diésel. Para ello, dijo, se están haciendo todas las pruebas al respecto. En esa línea, detalló que se están realizando pruebas en gasolineras y un estudio de los vehículos que existen en el sector rural para afectar lo menos posible a quienes más necesitan.
Sin embargo, el sector de distribuidores de combustibles asegura que no han sido tomados en cuenta en las mesas de diálogo y que el Gobierno se “está equivocando al respecto”.
Oswaldo Erazo, secretario ejecutivo de la Cámara Nacional de Distribuidores de Derivados de Petróleos del Ecuador (Camddepe), aseguró que están preocupados porque el Gobierno habla de focalización de subsidios, pero no toma en cuenta a los distribuidores, quienes son los que más conocen el mercado.
Hablan de mesas de diálogo, pero no sé con quién estarán conversando”.
La política que debería implementar el Gobierno, dijo Erazo, es una solución tecnológica controlada por la Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífero (ARCH), para facilitar el trabajo en las gasolineras. “Hablan de mesas de diálogo, pero no sé con quién estarán conversando”, sostuvo el representante de la Camdeppe.
Según las cifras que plantea el Fondo, aseguró Erazo, lo más probable es que el Gobierno “tope” el diésel y van a buscar revisar los costos de la gasolina extra y ecopaís. Además, sostiene que de revisar los costos de esas gasolinas no generarían ningún efecto inflacionario en el país.
- Súper: El Gobierno decidió retirar el subsidio a la gasolina súper a finales del año pasado, con el fin de ahorrar gastos del Gobierno.
- Gasto 2020: Según la proforma 2020, se estima que el gasto en subsidios (sociales y a los combustibles) sumarán $ 5.455 millones.
- Gasolinas: De los $ 5.455 millones programados para el próximo año para subsidios del Gobierno, el 36 % se destinará para los combustibles.
- Seguridad social: En el caso de las subvenciones a la seguridad social, el 39 % del monto presupuestado corresponde a ese rubro.