Textiles, vehículos y muebles, las industrias que no despegan
Si bien estos sectores presentan mejoría este año, siguen estando en el listado de los que reportan pérdidas, si las cifras se comparan con niveles prepandemia. Las empresas buscan mayor competitividad
La dinámica comercial de este año, que hasta agosto refleja ya una reactivación económica, tiene un efecto cadena que también llega al sector industrial. De los $ 142.089 millones en ventas registrados (data disponible) a nivel nacional, $ 22.450 millones salieron de la operación del sector manufacturero, esto fue un 17% más que el 2021 y un 20 % más si las cifras se comparan con el 2019, año previo a la pandemia.
Los comerciantes esperan un aumento de ventas ‘mundial’
Leer másAsí lo señalan las estadísticas del Servicio de Rentas Internas (SRI), que muestran una recuperación de la facturación en la mayoría de actividades. Los alimentos y bebidas (el sector de mayor peso industrial, con un 44 % de participación) llegó a vender $ 9.829 millones, eso representó un 21% más que el 2021, y un 35 % más versus el 2019.
Una mejora de la demanda interna y una mayor exportación, asegura Francisco Jarrín, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil, es lo que ha permitido a este nicho tener este resultado en ventas. Esto último, añade, es lo que explica también el buen desempeño que llegaron a tener otras industrias como la de papel, la de mayor crecimiento en este 2022 (un 37 %), por la mayor comercialización de cajas para empacar productos.
Pero en el sector productivo, no todo avanza al mismo ritmo. Si bien hay empresas que crecen respecto al año pasado, hay otras que ni siquiera logran estar al nivel de facturación previo al 2020, año de la crisis; todo lo contrario, retroceden.
En ese grupo aún está el sector de ensamblaje de vehículos, que con una recaudación de $ 348 millones retrocedió un 25 % respecto al 2019. David Molina, presidente de la Cámara de la Industria Automotriz Ecuatoriana (Cinae), explicó el pasado lunes a este Diario que esto se da por el fuerte desplazamiento que sigue teniendo la industria local, frente a una mayor venta de vehículos chinos. Hasta octubre, el número de unidades ensambladas cayó de 14.259 a 11.708.
En la lista le sigue la industria de fabricación de prendas de vestir. Según las cifras del SRI, su facturación hasta agosto alcanzó los $ 543 millones, esto fue un 13 % menos. Le siguen también la de impresión y reproducción de grabaciones (-13 %), la fabricación de muebles (-4 %) y otras de menor peso, como la de cueros (-23 %) y la de tabaco (su elaboración llegó a cero, luego de que la única fábrica del país cerró sus operaciones).
Para Christian Whali, presidente de la Cámara de Alimentos y Bebidas, aún hace falta ver mayor dinámica en la economía, si bien estas facturaciones en buena parte pueden atribuirse a una expansión económica, también es necesario citar la influencia que puede tener el efecto inflacionario.
En eso coincide Jarrín, quien alega que este año todavía subsiste el problema del alto valor del transporte. “Antes un flete que iba a China valía $ 2.000, hoy se sigue pagando entre $ 6.000 y $ 7.000 y eso sigue encareciendo el costo de muchas industrias que dependen de materias primas importadas”.
200 PARTIDASde importación de materias primas y bienes de capital aún siguen afectando la operación de este sector.
Existen más tarjetas, pero el consumo no despega
Leer másCuando faltan menos de dos meses para que culmine el año, Jarrín cree que el sector, sin una nueva amenaza de paralización indígena y sin un mayor efecto del toque de queda, podría terminar con un desempeño como el de ahora: con un 17 % más en ventas.
Lo preocupante, dicen los actores de este sector, es lo que podría venir el próximo año, un 2023 que se estima podría ser recesivo. De ahí el pedido al Gobierno de ayudar a inyectar mayor competitividad al sector productivo. El sector está a la espera de que las autoridades eliminen los aranceles a unas 200 partidas de importación, relacionados a los insumos que requieren las empresas para producir. Eso está aún en discusión.
- MÁS DATOS
APORTE DE LA INDUSTRIA. La industria manufacturera no petrolera es el sector económico de mayor aporte al PIB de la economía ecuatoriana: 15.691 millones de dólares en 2021 (equivalentes, en términos reales, al 13 % del PIB no petrolero).
CREACIÓN DE EMPLEOS. La alta facturación del sector se atribuye, en mayor medida, a una mejora en las condiciones económicas. Un efecto de esto es la creación de puestos de trabajo. Hasta septiembre se generaron 106.000 nuevas plazas, respecto al año anterior.
INSUMOS. De enero a agosto, se importaron $ 7.799 millones en materias primas y bienes de capital, eso fue un 21 % más. No obstante, el incremento respondió en gran medida al alza de costos. Las toneladas importadas fueron casi las mismas.