Las trabas crediticias afectan a las mujeres
Las emprendedoras acceden al 44 % de los préstamos que solicitan. La falta de garantes y los salarios más bajos son factores.
Las mujeres ecuatorianas lideran el mercado regional del emprendimiento. Así lo señala el estudio más reciente de Global Entreprenurship Monitor, que establece que el índice nacional supera con creces a los pequeños negocios fundados por mujeres en países como Chile, Brasil y Colombia. Pese a ello, las emprendedoras locales aún se enfrentan a una traba: conseguir préstamos para fortalecer sus negocios.
Según datos del Banco Central del Ecuador, por cada solicitud de crédito que realizan en la banca, las mujeres reciben 30 % menos que los aplicantes masculinos. Esta cifra también la corroboran datos de la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria, que determinan que estas contribuyen con cerca de $ 9.690’553.484 anuales. Solo el 44,7 % reciben los créditos a los que aplican e incluso entonces obtienen el 40,7 % del monto solicitado.
La brecha salarial crece en respuesta a la pandemia
Leer másLa economista especializada en género Carmen Sánchez señala que la brecha responde a sesgos culturales y sociales, pero también a productos crediticios que no están diseñados para este segmento poblacional. “Hay varios factores que contribuyen a la brecha, principalmente la precariedad en la inserción en el mercado laboral, ingresos más bajos y la falta de garantes. En la mayoría de los casos, las emprendedoras son jefas de hogar y no cuentan con un sistema de apoyo. Esto hace que les sea imposible cumplir con los requisitos de los préstamos tradicionales”, explicó.
En una entrevista previa, Rebecca Ruf, vicepresidenta de la Alianza Financiera para las Mujeres, indicó que la falta de educación financiera también es una traba para las emprendedoras, pues “no solicitan los montos adecuados, aunque está demostrado que las mujeres invierten en servicios que aumentan la productividad”.
En los últimos dos años, entidades públicas y privadas han empezado a desarrollar iniciativas especializadas en este sector, entre ellas el Banco del Pichincha, que ha creado un fondo de $ 18,5 millones con este fin, así como el Banco Bolivariano, el Banco del Pacífico y BanEcuador. En junio, esta última entidad lanzó ‘Nosotras emprendemos’, que otorga créditos de hasta $ 10.000 exclusivamente a emprendedoras.
Pero las iniciativas no necesariamente son suficientes. Así lo explica la catedrática Ana Carrasco. “El problema con el sistema tal y como existe, incluso con estos productos ‘rosa’, que a veces son más marketing que otra cosa, es que no toman en cuenta las dificultades a las que se enfrentan las mujeres, sobre todo las jefas de hogar. Se debe pensar en las garantías no tradicionales (joyas, muebles), los periodos de gracia y tasas más flexibles para dar viabilidad a estas pymes”.