Ecuador: Un país a merced de liderazgos políticos debilitados
La esfera pública sigue comandada por la vieja guardia. La falta de nuevas figuras revela la irresponsabilidad y el desinterés de partidos
La falta de visualización de nuevos líderes políticos y el término de otros son un gran problema para el país, creen académicos en Ciencias Políticas. Para ellos, el futuro de las organizaciones políticas está en juego.
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Leer másEl liderazgo político ecuatoriano, como en otros países latinoamericanos, se caracteriza por provenir de antiguos mandatarios presidenciales o locales, como por ejemplo Rafael Correa o Jaime Nebot, comenta Ivonne Téllez, especialista en Ciencias Políticas, catedrática e investigadora de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador. A esto, ella suma un debilitamiento de los movimientos y partidos políticos.
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El liderazgo masculino está más marcado que el femenino, debido a que la presencia masculina ha sido preponderante.
Para Simón Pachano, catedrático, especialista en Ciencia Política e investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), el problema se debe a que en el país no hay organizaciones políticas que estén conformadas institucionalmente, que gocen de una vida permanente, que tengan afiliados, que desarrollen actividades internas, que capaciten gente, que sean semilleros de políticos y que de esta manera formen líderes.
En el país no existen partidos políticos ni líderes. Las actuales organizaciones políticas solo son membretes.
“Al no existir partidos, no existe la cantera para los líderes”, ya que los líderes en política tienen que formarse de esa manera, argumenta.
Los únicos exentos de esta formación son los liderazgos individuales, como el caso de Rafael Correa, opina Pachano, ya que provino de la antipolítica, de afuera de la política, además de que cuestionaba a los partidos, por lo que se negó a crear uno.
Tanto Alianza PAIS como ahora Revolución Ciudadana no tienen una estructura de partido, se depende totalmente del caudillo, por lo que tampoco construye una posibilidad de recambio para ese liderazgo fuerte.
El verdadero liderazgo tiene que ver con la posibilidad de crear un proceso de definición y construcción de políticas públicas.
No obstante, los discursos autoritarios, de mano dura y paternalistas conectan muy bien con ciertos públicos que de alguna manera quieren sentir seguridad y protección inmediata de parte de algún líder político, advierte Natalia Angulo, especialista en Comunicación Política y catedrática de la Universidad Central del Ecuador.
“Toda esa maquinaria comunicacional que operó durante 10 años y presentaba el desarrollo de obras, todavía rinde frutos, ya que irrumpió la lógica de gobiernos anteriores”, añade, más la manera en cómo Correa aprovecha Twitter (ahora X). Tanto así que un estudio anual de Twiplomacy lo mencionó como el líder político más conversador en esta plataforma. “Todo este capital social y simbólico todavía rinde frutos, aun cuando estamos en 2023”.
Pero habría que ver hasta cuándo el correísmo, como fuerza política, podría seguir subsistiendo sin tener a Correa como líder, reflexiona Téllez. Por lo que la elección de hoy es importante, ya que “puede ser la que marque la continuación o el fin del fenómeno político que es el correísmo”, sentencia Pachano.
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Leer másSin embargo, para construir la imagen política es importante el antecedente: de qué partido proviene, quién lo ha apoyado, de quiénes ha estado rodeado, explica Angulo. El trabajar consistentemente en un legado es también importante para un político. Por ello es que Jaime Nebot todavía “reflota en el imaginario y en la opinión pública”. Aunque para el docente, Nebot ya no tiene arrastre.
Tanto en el país como en la región, las figuras masculinas van a seguir siendo preponderantes y, en este tipo de liderazgo asociado a un partido, al no contar con el apoyo del patriarca, tras la evaluación de una gestión, hay figuras que se retiran de la palestra pública, como es el caso de Cynthia Viteri luego de su labor municipal, sostiene Téllez. “Esto no hace que se pierda el liderazgo que marcó la política del país hace unos años, pero lo afecta y debilita”.
Otra problemática que se presenta en la política es invisibilizar el trabajo y las voces de otras figuras que también están accionando, opina Angulo. Para Téllez, este también es un problema, ya que pueden existir nuevos líderes que no han podido posicionarse fuertemente, aunque de todas maneras se los puede encontrar en distintas facciones, como son los candidatos presidenciales o las figuras que han tenido ciertos recursos de poder, o los disruptivos, que buscan desenmascarar los actos de corrupción, como lo fue Fernando Villavicencio.
Por eso Angulo cree que en el sector indígena también se debe dar espacio a otros actores y no solo a quienes han participado en determinados procesos. Aunque para Téllez, el liderazgo en este sector es más consolidado, ya que hay poca transición y cambios, así como pocas organizaciones indígenas; por lo que sus figuras medianamente se han mantenido, como en el caso de Yaku Pérez y de otros dirigentes, opinan las catedráticas.
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Leer másOtro aspecto a considerar es que quienes están en algún cargo, sea una alcaldía o prefectura, y quieren fortalecer su liderazgo, recurren a crear redes clientelares, ya que el liderazgo se basa mucho en el clientelismo, enfatiza Pachano. Además, buscan siempre elementos para confrontar, estar permanentemente en los medios y generar discusión.
Además, la persona que gane deberá cumplir lo ofrecido, de lo contrario decaerá su figura de liderazgo. Sin embargo, quien no gane también tendrá que ser responsable porque a pesar de haber perdido, no deja de liderar un proceso y tendrá que consolidarlo, pero desde otros espacios para así ganar credibilidad, afirma Angulo. Pero una cosa es que puedan seguir dentro del escenario político y otra que lleguen a Carondelet, concluye Téllez.
GOLPES DE LIDERAZGO
Frenesí: Todo líder levanta pasiones muy fuertes, ya sea a favor o en contra; pero hay líderes que logran que lo positivo para ellos sea mayoritario. Jaime Nebot lo logró en Guayas, pero no en todo el territorio nacional, por lo que perdió la Presidencia contra Abdalá Bucaram, lo que le significó un fuerte golpe.
Ser jocoso: Los malos resultados al administrar un país y el que su gobierno haya sido calificado como corrupto y desastroso hizo que Abdalá Bucaram se hundiera y perdiera su liderazgo, además de los años de exilio. Las personas lo seguían por sus excentricidades y no por un programa completo.
No mediar: La capacidad de negociar y de llegar a acuerdo con otros actores políticos es fundamental, sobre todo en escenarios polarizados. Este fue el gran error de Guillermo Lasso y por el que su gobierno tuvo que ser interrumpido, ya que el Ejecutivo no logró entablar acuerdos con el Legislativo.
Discusiones: La falta de comunicación y de acuerdos en el interior de una organización la debilita, como fue el caso de la fragmentación del movimiento Pachakutik. Por ello es mejor una agrupación con una voz unánime. Así también, la ruptura en Alianza PAIS que generó Lenín Moreno le dejó una gran factura al correísmo.
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