Ecuador, entre los paises mas ineficientes en salud
El informe sobre la salud en el mundo de la OMS estimaba en 2010 que entre el 20 % y el 40 % de todos los recursos gastados en sanidad se despilfarran.
Ecuador está entre el grueso de países más ineficientes en sanidad en América Latina y el Caribe. Así lo reseña el primer estudio de eficiencia de los sistemas de salud de la región publicado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que lo ubica en el puesto 54 de un total de 71 estudiados, por debajo de Chile, Colombia, Paraguay, Brasil y Venezuela.
El informe, que mide seis parámetros, retrata una realidad en la atención en la salud que contrasta con la gran cantidad de recursos invertidos: 5.000 millones de dólares entre 2007 y 2012 y una cifra mucho mayor hasta el 2017.
Los resultados de este nuevo estudio son similares a los registrados en un informe del 2010 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo que indica que se ha hecho poco para cambiar la realidad.
Entre las 71 naciones analizadas, Ecuador está entre las últimas 17 de la tabla, en donde se sitúan la mayoría de las latinoamericanas y caribeñas. El único país latinoamericano mejor ubicado es Chile, que está en la posición 8.
El estudio del BID hace hincapié en que los recursos se asignan a intervenciones que no maximizan las mejoras en salud, como es gastar más en cuidados curativos (atender enfermedades) que en medidas preventivas. La subutilización de medicamentos genéricos es otra gran fuente de ineficiencia. A ello le suman la mala administración y la corrupción.
Diana Pinto, especialista líder en salud del BID, dijo que la calidad institucional es un factor decisivo para contar con mayor eficiencia sanitaria. Asegura que “aquellos países donde los gobiernos tienen más transparencia, participación ciudadana y lucha contra la corrupción, puntúan más alto en estas medidas”. En este grupo no está Ecuador.
Otra de las cuestiones que intervienen en la eficiencia sanitaria, según Pinto, es la calidad de la atención primaria. Cuanto más oportuno sea el tratamiento, se previene el deterioro agudo, la progresión y las complicaciones en personas enfermas.
Exministros de Salud de Ecuador aseguran que mientras no se cambie la política, no habrá recursos que alcancen.
Francisco Andino (infectólogo) dice que a pesar de que en Ecuador la inversión en salud creció 10 veces en una década (unos $ 3.200 millones), los resultados no se traducen en una nación más sana. Al contrario, está más enferma porque hay más malnutrición, desnutrición y patologías crónicas no transmisibles como la diabetes y la hipertensión, que aumentan los gastos en salud.
Con él concuerda el médico endocrinólogo Francisco Vera, expresidente del Colegio de Médicos del Guayas, quien al igual que su colega cree que el grave problema es la inexistencia de un plan de fomento y prevención de la salud, tal como lo indica el estudio.
“Hay que fomentar las buenas maneras y los buenos hábitos alimenticios para evitar, en el futuro, el colapso del sistema de salud. Salud preventiva antes que salud curativa”, sostiene.
El informe del BID anticipa que, en un futuro cercano, se prevé que los gastos en salud seguirán escalando, “impulsados por factores como el envejecimiento de la población, la creciente incidencia de enfermedades crónicas, los avances socioeconómicos y su consecuente mayor demanda de servicios de salud, así como la adopción de desarrollos tecnológicos”.
Esas tendencias, dice el documento, fortalecen los argumentos a favor de una mayor eficiencia para frenar el crecimiento del gasto público en los países de América Latina y el Caribe.
Causas y efectos
Atención primeria
Según el informe, la gestión proactiva de las enfermedades en la atención primaria puede contribuir a contener el gasto en salud, al reducir o incluso evitar la necesidad de visitas de urgencia y las hospitalizaciones.
Política Farmacéutica
Hay, según el estudio, muchas opciones de estrategias para controlar precios y priorizar medicamentos, y así invertir en aquellos que realmente hagan la diferencia y añadan valor y mejoren la eficiencia.
Fuentes de Ineficiencia
Combinación inadecuada o costosa de profesionales, precios altos, baja calidad y uso irracional de medicinas, sobreutilización de productos y servicios sanitarios y desvíos dirigidos a la corrupción y el fraude.