Ecuador tambien se prepara contra la peste porcina
La Secretaría General de la Comunidad Andina (SGCAN) y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) capacitaron a funcionarios y representantes de gremios productivos de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú en l
Ecuador participa en la estrategia para evitar la peste procina en América Latina. La Secretaría General de la Comunidad Andina (SGCAN) y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) capacitaron a funcionarios y representantes de gremios productivos de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú en la prevención.
El IICA informó que en la capacitación participaron también miembros del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal (APHIS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Controles reforzados en fronteras, manejo de desperdicios alimentarios de aviones y barcos, atención redoblada a los signos clínicos de porcinos en las granjas para eventuales reportes a los servicios oficiales de sanidad e incremento de las medidas de bioseguridad constituyen factores clave para evitar una potencial diseminación.
En Ecuador el ente encargado del control es Agrocalidad (Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario), que ahora trabaja agresivamente para evitar la llegada del fusarium raza 4 que afecta a extensas zonas de Asia, África, Australia y que se sospecha está ya en Colombia.
El asesor de la Dirección de Inocuidad de los Alimentos y Salud de la UE (Unión Europea), Francisco Reviriego, dijo que esta estrategia que se aplica en el bloque permite con toda seguridad la circulación de animales y productos desde zonas libres al interior de la UE.
Desde que reapareció la enfermedad en el 2007 es necesario fortalecer la bioseguridad, el entendimiento de la situación en animales silvestres, la identificación animal y la trazabilidad, el diagnóstico, la normativa y el trabajo colaborativo.
La peste porcina africana es una enfermedad altamente infecciosa para los animales e inofensiva para las personas y no existe una vacuna efectiva. En América no está presente desde hace casi 40 años.
Fue detectada en Cuba en 1971 y 1980, en Brasil y República Dominicana en 1978 y en Haití en 1979. Sus efectos fueron devastadores y generaron grandes pérdidas.
En junio del 2019 el organismo hemisférico especializado en desarrollo agropecuario y rural hizo un llamado a sus países miembros a reforzar los controles sanitarios ante la expansión de la peste.