Editorial: Creciente violencia criminal
El número de muertes violentas que se han dado en estos últimos tiempos en varios lugares de nuestro país preocupa enormemente a la ciudadanía ecuatoriana que se siente cada vez más insegura y amenazada por una acción delictiva que comete no solo robos y asaltos, sino que, además, para cumplir con sus protervos fines, utilizan armas blanca y de fuego contra sus víctimas.
A esto hay que sumar la acción del sicariato, se cometen crímenes por paga, ya sea por venganza, por malos repartos o por diferencias en el narcotráfico.
Hay que agregar también los asesinatos pasionales con el registro de un número cada vez más alto de femicidios.
Es tan preocupante la situación de inseguridad y violencia, que las autoridades de Policía informan que únicamente en la Zona 8, que comprende Guayaquil, Durán y Samborondón, se han registrado 263 crímenes, es decir un 34% más de muertes violentas que los 196 crímenes anotados el año pasado.
Esta riesgosa situación que nos desampara cada vez más requiere, pues, de un servicio policial cada vez más numeroso y constante, sobre todo en las zonas más conflictivas y peligrosas.