Elecciones Ecuador 2025: ¿qué cambios han hecho González y Noboa para el balotaje?
La candidata correísta modera su discurso, mientras que Noboa se concentra el su gestión gubernamental en territorio
Sin que haya comenzado aún la campaña electoral de la segunda vuelta, los candidatos presidenciales finalistas, Daniel Noboa y Luisa González, ya han bosquejado los caminos que seguirán en su intento por llegar al Palacio de Carondelet el próximo 13 de abril de 2025.
Por ejemplo, el presidente y candidato Noboa ha centrado su atención en la gestión en territorio. De hecho, 19 de las al menos 30 localidades que ha visitado en diferentes provincias desde la primera vuelta electoral corresponden a zonas donde la candidata del correísmo, Luisa González, obtuvo la victoria.
González, por su parte, además de continuar con su agenda en territorio desde la primera vuelta, ha dedicado tiempo a abordar temas polémicos, como la dolarización, la niñez trans, entre otros, en un intento por modular su mensaje de cara al balotaje.
Noboa y González rearman su campaña para la segunda vuelta
Las acciones de ambos postulantes, según el analista político Giuseppe Cabrera, reflejan una idea de su estrategia para la segunda vuelta: González busca adoptar una postura conservadora, mientras que Noboa intenta fortalecer su candidatura a través de la gestión gubernamental.
Aunque el correísmo cuenta con una base mayoritariamente progresista y podría estar de acuerdo, por ejemplo, con el fallo sobre la niñez trans, esa no puede ser la postura de González, ya que “es un tema con el que la mayoría de la ciudadanía está en contra”, acota.
Del mismo modo, Cabrera señala que Noboa está reforzando lo que considera que le funcionó desde el inicio: su presencia en territorio. “Se arriesga un poco más, aunque es lo que ya venía haciendo en la primera vuelta. Dobla la apuesta al salir y hablar de gestión”.
El margen de conquista de votos para Noboa y González es estrecho
No obstante, la estratega política Tatiana Larrea advierte que el porcentaje de votantes disponibles es bajo, ya que la primera vuelta fue casi un empate. “Las campañas deberían enfocarse en conquistar esos votos, proponiendo y hablando de los temas de interés y preocupaciones de la ciudadanía”.
Aunque Noboa y González han entrado en un tira y afloja sobre ciertas temáticas, como la dolarización, Larrea estima que no es electoralmente rentable centrar la campaña en ataques o en asuntos judiciales o personales, ya que “solo desprestigian más la política y generan mayor temor y desconfianza”.
En el caso de Noboa, la estratega sostiene que su presencia en territorio es indispensable, debido a su doble rol y la oportunidad de responder con gestión. En cuanto a González, sería positivo que deje la postura defensiva y pase a una fase más propositiva y de conexión con el electorado que no votó por ella.
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Sin embargo, más allá de estas consideraciones, Larrea hace hincapié en que tanto la campaña de Daniel Noboa como la de la correísta Luisa González tienen el mismo reto: salir de la polarización y el ataque, para comunicarse con los votantes disponibles, que no son muchos ni están polarizados.
Cabrera, por su parte, lo plantea de otra manera: “Quien cometa menos errores, gana”. En ese sentido, sostiene que ambos candidatos caminan por una delgada línea entre ganar votantes o aumentar su rechazo, dependiendo de sus acciones u omisiones en la antesala de la segunda vuelta.
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