El espacio vuelve a seducir al Estado

Ecuador como simulador de otros mundos es la propuesta que inversionistas estadounidenses tienen para el desarrollo local de la industria espacial. Aunque este programa tiene un enfoque civil y turístico, el objetivo es generar conciencia sobre el espacio e, incluso, entrenar a la Fuerza Pública.

La iniciativa llegó a través del coronel retirado y exastronauta de la NASA, Gregory Johnson; y del director de ventas del programa Space Nation y gerente de GEN Space, Stephan Rickie. “La idea es que la gente pueda vivir la experiencia de entrenar como un astronauta y ver cómo cambia sus vidas”, indica Rickie en entrevista con EXPRESO y explica que la potencialidad de Ecuador radica en su biodiversidad.

“Este país tiene selva, zonas montañosas, costeras y el inicio de la evolución con Galápagos”, señala Rickie y destaca que esto es relevante porque al explorar el espacio, pensar en la biodiversidad de los mundos será muy importante.

Por su parte, el exastronauta Johnson explica a este Diario que “el mundo está haciendo muchas cosas en el espacio” y que ese es el futuro. Además, explica que su visita es porque “creemos que Ecuador puede ser un líder en Sudamérica” en temas del espacio.

En ese sentido, Rickie y Jhonson, durante su visita, se reunieron con autoridades del Ministerio de Turismo, la Fuerza Aérea Ecuatoriano (FAE) y empresas privadas para socializar el concepto.

Este Diario ha intentado abordar el tema con el Ministerio de Turismo para conocer cuál será la participación del Estado, si hay marco legal que ampare este tipo de actividades y, sobre todo, si habrá inversión estatal. Sin embargo, la cartera de Estado no ha dado respuesta alguna.

Para el presidente de la Cámara de Turismo del Guayas, Holbach Muñetón, todo nicho de mercado que se pueda abrir “es importante tenerlo, porque hay demanda de eso”. Además, explica que para las ofertas turísticas hay que “tener las mentes abiertas”.

Con Muñetón coincide el periodista y analista político Martín Pallares. “Me parece bien que se estimulen actividades turísticas novedosas”, dice Pallares, pero advierte que esto no puede significar que se ponga en riesgo la seguridad de las personas.

Además, destaca que el rol del Estado debe limitarse a regular que este tipo de negocios no involucre un “riesgo irresponsable”. Esto como referencia que se debe garantizar la licitud y que no sean empresas que laven dinero en el país.

Asimismo, indica que el recuerdo del nanosatélite Pegasso está presente, pero que guarda distancias con la iniciativa actual. “Pegasso fue financiado con dinero público, la idea es no caer en lo mismo”, puntualiza Pallares, quien fue crítico del proyecto Pegasso.

Por otro lado, el exasesor de la Dirección de Desarrollo Aeroespacial de la FAE, Álex Jiménez, confirma a EXPRESO que los inversionistas se reunieron con autoridades de la Fuerza Aérea Ecuatoriana para abordar otra de las aristas de su propuesta.

“Esta visita no es un esfuerzo aislado”, indica Jiménez y destaca que es parte de una iniciativa global para incentivar el interés sobre los temas espaciales y el desarrollo tecnológico alrededor de ello.

Asimismo, explica que la propuesta es “acercar el ecosistema que implica desarrollarse en el entorno espacial” con entrenamientos virtuales y presenciales en ambientes naturales controlados; y guiados por exastronautas.

Sin embargo, Jiménez hace hincapié en que estas iniciativas que buscan fomentar la consciencia sobre los temas espaciales no son tomadas en serio en el país.

Además, explica que mirar hacia las estrellas es importante para “ejercer soberanía sobre la tecnología” que podamos ubicar en el espacio y así ayudar a resolver problemas de seguridad, entre otros.

En ese sentido, Jiménez señala que es importante que el país vuelva a tener una entidad gubernamental que se encargue de liderar el desarrollo espacial nacional.

“No todos los países la han tenido fácil”, indica y dice que eso no impide que Ecuador planifique y se inserte en la “fuerte ola” del espacio.

SE NECESITA DE VOLUNTAD POLÍTICA

La Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), según el exasesor de la Dirección de Desarrollo Aeroespacial, Álex Jiménez, “ha estructurado planes, programas y proyectos” en los temas espaciales. Sin embargo, ante la situación política y económica que viene arrastrando el país, se han visto relegadas y sin una orientación.

“Dependen de la voluntad política”, indica Jiménez y explica que, mientras los factores externos se regularizan, la FAE impulsa el desarrollo espacial a través de investigaciones, el desarrollo de tecnología y el fortalecimiento de su personal.

Asimismo, indica que la Fuerza Aérea concibe al desarrollo espacial como un “eje primordial de evolución” para la sociedad civil y la estructura militar. En ese sentido, indica que será necesario volver a crear una institución pública que concentre los esfuerzos y pueda funcionar como contraparte para la cooperación internacional y la gestión de recursos para el desarrollo aerospacial del país.

Sin embargo, también destaca que esto implica legislar la inserción de Ecuador en los temas espaciales y así ejercer derechos sobre los segmentos de la órbita geoestacionaria, como dicta la Constitución de la República en su artículo cuatro.

“Lo ideal sería desarrollarnos a la par (entre el avance de la FAE y la creación del marco legal) para no tener que hacer todo esto cuando ya haya el interés y los recursos”, explica Jiménez. Además, indica que el avance será progresivo.

“Esa es la fórmula que ha funcionado en otras partes”, indica el mayor Jiménez y explica que, en un principio, el país debe estar en la capacidad de manejar satélites de terceros, pero que el objetivo es desarrollarlos en el país y que para ese momento ya se tenga la experiencia para ponerlo al servicio de los ciudadanos.