La estrategia de comunicación está marcada por los escenarios
El presidente se muestra contestatario con periodistas y autoridades locales. Con los ciudadanos se presenta abierto a escuchar sus reclamos
Sin gestión, no hay cambio de estrategia de comunicación que resista. Un presidente confrontativo con quienes considera poder, pero cercano y condescendiente con los ciudadanos, es lo que proyecta el presidente Guillermo Lasso desde hace una semana.
Ni bien se posesionó al nuevo secretario de Comunicación, Andrés Seminario, el 12 de octubre pasado, y el mandatario ya dio algunas pistas de cómo quiere ser visto en esta nueva etapa de un área que ha sido fuertemente criticada en la actual administración.
Esa noche, Lasso mantuvo una entrevista con el periodista Carlos Vera, en la que lo corrigió en varias ocasiones y apuntó contra los medios de comunicación al decir que buscan “arrinconar al Gobierno y al presidente” por las noticias que, a su criterio, publican.
Deseamos que al Gobierno le vaya bien, no solo en el tema comunicación, pero es cierto que no se puede comunicar lo que no existe, a no ser que sea un ilusionista.
El analista político Giuseppe Cabrera le dijo a EXPRESO que el cambio de estrategia en la comunicación del presidente es “tan evidente como preocupante” por la volubilidad que ha demostrado el mandatario respecto a su personalidad.
“Hasta ahora no se logra descifrar cuál es el verdadero Guillermo Lasso: el de la segunda vuelta, en donde planteó el encuentro; el que confrontó con sectores sociales y políticos al poco tiempo de posesionado o el presidente ‘listillo’ que intenta sorprender a Vera o a los alcaldes del Guayas, apuntando a dar una imagen de omnipresencia”, cuestionó Cabrera.
Se refiere al presidente Lasso abriendo los micrófonos, en Durán y Pedro Carbo, para que los ciudadanos se pronuncien y hagan conocer sus necesidades. “Yo creo que Durán, después del hospital, lo que más ansía es agua”, dijo Lasso, motivando el reclamo justo de los presentes al alcalde Dalton Narváez.
En Pedro Carbo, luego de entregar viviendas, abrió una suerte de conversatorio en el que uno de los presentes le dijo que era artesano del calzado, pero no contaba con los recursos para hacer reflotar su negocio. “Anda el día lunes (a BanEcuador) a nombre mío y diles: ‘Guillermo Lasso es mi padrino’”, obtuvo como respuesta.
Para el encuestador y especialista en Mercadeo, Blasco Peñaherrera Solah, sería un grave error que la estrategia apunte, por un lado, a confrontar con algunos sectores, más para un gobierno con niveles bajos de aceptación, creyendo que eso le dará réditos ante una población que en los sondeos se muestra desesperanzada por la falta de gestión.
Por lo que se ha podido ver, estarían apuntando a dar la imagen de un presidente que está al tanto de todo y tiene respuestas para todo. Habrá que ver si eso les funciona.
“Que el presidente se reúna con un grupo de ciudadanos y abra un micrófono para que le digan cualquier cosa, no suple lo que la mayoría de ecuatorianos necesitamos que son soluciones concretas a dos temas básicos: seguridad pública y reactivación”, señaló Peñaherrera.
Seminario se comprometió esta semana a hablar con los medios de comunicación sobre hacia dónde apunta su estrategia en el Ejecutivo. “Los análisis no nos van a cambiar la realidad, pero debemos abrir espacio a esos puntos de vista, escuchando, debatiendo”, dijo el día de su posesión.
En días pasados, el secretario de la Administración Pública, Iván Correa, aseguró que el nuevo secretario tiene clara la estrategia para poner en la palestra de los ciudadanos el proyecto político del Gobierno.
