Un estudio impulsa el dragado del Guayas
El estudio tiene relación al tema de sedimentación en la confluencia de los ríos Daule y Babahoyo hacia el estuario del río Guayas, donde ya se ha formado el islote El Palmar y la necesidad impostergable de dragar estos ríos para evitar sus consecuenci
Cumpliendo con su compromiso, el alcalde Jaime Nebot envió al prefecto del Guayas, Jimmy Jairala, un resumen ejecutivo sobre un estudio de las condiciones hidrológico-hidrodinámico en los ríos Daule, Babahoyo y Guayas, que servirá para acometer las acciones que permitan el control de la sedimentación que afecta a más de una decena de ciudades, incluida Guayaquil.
El estudio tiene relación al tema de sedimentación en la confluencia de los ríos Daule y Babahoyo hacia el estuario del río Guayas, donde ya se ha formado el islote El Palmar y la necesidad impostergable de dragar estos ríos para evitar sus consecuencias inmediatas y mediatas.
El resumen es previo a la entrega del documento final conteniendo el estudio en todos sus detalles, que será entregado por el alcalde Nebot a finales de noviembre a la Prefectura del Guayas, así como a otras entidades del sector público con competencia sobre el tema.
Se espera que este documento sea considerado como un aporte de la Municipalidad de Guayaquil, para “una real y científica comprensión del problema en sus causas, efectos y soluciones”, según consta en la comunicación que acompaña al resumen enviado a nombre del prefecto por el alcalde.
El estudio, realizado por la compañía Intecsa-Inarsa, en colaboración con el instituto holandés Deltares y financiado a través de un Convenio de Colaboración Técnica con el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) analiza también diferentes propuestas de control de la sedimentación para prolongar los tiempos entre dragados consecutivos, imprescindibles para mantener la navegabilidad, evitar las inundaciones y que se causen obstrucciones en el alcantarillado sanitario y pluvial de Guayaquil.
“El estudio que esta Alcaldía entrega como aporte -continúa la comunicación- cumple con el objeto de tener una visión estratégica de mediano y largo plazo, que permitirá adaptar a la ciudad de Guayaquil y su área metropolitana a una serie de escenarios climáticos previsibles, permitiendo delinear, a futuro, un ordenamiento hidráulico y territorial en la ciudad y su área de influencia, de manera que, en su desarrollo urbanístico, se vea libre de inundaciones periódicas pluviales y por desbordamiento de los cauces de los ríos y esteros que la atraviesan”.
