El femicidio, un mal que preocupa
He leído en la prensa nacional el caso de una mujer en el Guasmo sur de Guayaquil que por segunda vez en este año ha sido atacada violentamente por su expareja. El sangriento episodio, esta vez, fue con una comba que el despechado estrelló en repetidas ocasiones contra la humanidad y la cabeza de la mujer que le ha producido serias fracturas. Los cirujanos en el hospital de la zona, a donde fue llevada la víctima, lograron estabilizarla y atender las lesiones. Esta mujer se ha salvado por varios factores. ¿Y el hombre? Libre y con medidas cautelares desde el primer ataque. ¿Vamos a esperar que en un tercer intento logre su cometido de asesinarla?
Dra. Teresa Reyes Yábar