El feriado arranca a medio gas y limitado por la inseguridad
Confusión en algunos turistas de Santa Elena por el estado de excepción. Playas recibe a visitantes, pero no espera tantos como en Carnaval
La policía Katiuska Pallasco se acercó a un grupo de turistas que llegó a Salinas, Santa Elena, para explicarle las restricciones que establece el estado de excepción, que rige en esa provincia y otras zonas del país, este viernes 7 de abril.
“¡Ah caramba! Es decir, que la rumba es hasta la una de la mañana. ¿Después de esa hora, qué hago, señorita?”, le dijo uno de los visitantes. Pallasco le respondió que a partir de esa hora tendrá que ir a descansar, porque empieza el toque de queda que se extiende hasta las 05:00.
El estado de excepción que se encuentra en vigencia divide criterios entre los visitantes, según constató EXPRESO en un recorrido.
“Se viene a la playa a pasarla bien. En el día, en el mar, y el complemento es en la noche, ya sea en una discoteca o un bar-karaoke. La diversión tiene que ser libre”, comentó el guayaquileño Julio César Crespo.
La machaleña Cristina Ledesma también compartió esa opinión. Ella desconocía de la medida cuando llegó a Montañita: “No puede ser que la actividad en la calle de los cócteles se termine temprano. Me parece ilógico, yo tenía pensado quedarme hasta las 04:00”.
Pero contrario a los criterios de Crespo y Ledesma, el cuencano Joel Castro comentó que la medida es necesaria ante tanta delincuencia en el país. “Me he enterado de que en Salinas se han dado asaltos en restaurantes. Estimo que con la medida se podrá salir a comer en las noches, sin problemas y luego a descansar”, dijo Castro.
Manabí ve como una oportunidad atraer el turismo que evita las zonas inseguras
Leer másHasta el mediodía de este viernes 7 de abril, la ocupación hotelera en los balnearios peninsulares estaba en el 55 % e iba en alza, aunque de forma lenta. En los hoteles, los recepcionistas recibían llamadas de los posibles clientes que preguntaban por el clima y las medidas tomadas por el estado de excepción.
Cerca de Santa Elena, en Playas, Guayas, había un panorama similar, aunque en este cantón no rige el estado de excepción. Sin embargo, los lugareños conocen que en el feriado por Semana Santa el flujo de los turistas se incrementa desde la noche del viernes. Esto ocurre “porque los turistas cumplen primero con las actividades religiosas del Viernes Santo”, indica Wilson Yagual, quien alquila carpas en la playa.
Este viernes 7 de abril, la playa y comedores permanecían con poca gente. Esperanza López, presidenta de la Cámara de Turismo, dijo que hasta la mañana de este viernes 7 de abril había un 25 % de reservación hotelera y esperaban llegar hasta el 50%. “Así son los feriados de Semana Santa”, reiteró López.
Julio Pivaque, uno de los turistas que llegó con su familia, se mostró molesto porque ciertos sectores de playa estaban llenos de palizadas que arrastran los ríos que desembocan en la Costa. El martes pasado se realizó una minga, pero la naturaleza tiene otro ritmo.
En esta localidad, el Municipio organiza el Festival de la Fanesca, donde se elegirá al mejor plato, en el malecón.
En playas de la provincia de Manabí también hubo una concurrencia regular de visitantes, al menos hasta la mañana de este viernes 7 de abril. Eso se evidenció en balnearios de Manta, mientras que en el norte manabita la llegada de viajeros fue minúscula.
La inseguridad que se ha desatado en varias provincias del país ahuyenta a los turistas, quienes analizan ese tema antes de viajar, opinaron viajeros consultados.
Los guayaquileños adelantaron sus viajes por la Semana Santa
Leer más“La criminalidad en el país ha crecido. Manabí tiene muertes en aumento. Así lo vemos en noticias. En ese contexto, se piensa dos veces en venir. Sabemos que se fortalece la seguridad para los feriados, pero deberían existir planes integrales donde colaboren de forma sinérgica el Gobierno, los GAD locales e incluso la población”, comentó Édison Samaniego, quien llegó desde la provincia del Azuay a visitar la playa El Murciélago, en Manta.
Unos 3.456 policías se esperaba que resguardaran la seguridad de Manabí.
Más al norte, en Esmeraldas, donde rige un estado de excepción desde marzo, unos 1.100 vehículos particulares, 75 buses de turismo y unos 150 buses interprovinciales ingresaron a la capital de esa provincia, entre la noche del jueves pasado y las primeras horas de la mañana de este viernes 7 de abril, según dio a conocer la Empresa Pública de Tránsito, Transporte Terrestre y Seguridad Vial de Esmeraldas.
Los turistas que llegaron a la provincia se dirigieron en su mayoría a las playas del sur, como las de Tonsupa, Atacames y Mompiche.
Sin embargo, estas playas no lucieron llenas en su totalidad, como esperaban los operadores turísticos. En Atacames, por ejemplo, hubo poca presencia de turistas durante las primeras horas de este Viernes Santo. Las sillas y parasoles que hay en la playa estaban casi vacíos.
Los dueños de negocios esperaban que el panorama mejore por la tarde y la mañana del sábado 8 de abril.