Fidel Marquez: “Me falto tiempo para insertar a la universidad a nivel internacional”
Fidel Márquez deja el rectorado de la Universidad Ecotec luego de 10 años de desempeñar este cargo como titular y tras haber estado encargado de estas funciones por un año.
Fidel Márquez, rector saliente de la Universidad Ecotec, habla del trabajo realizado durante su administración, de los temas que deja pendientes y de su futuro dentro de la institución.
- ¿Cuáles cree usted que han sido los principales logros obtenidos como rector?
- Que una idea se convierta en realidad. Es un logro de todo un equipo de trabajo que tuvo la visión de crear una institución que le diera cabida a esos jóvenes que no tenían acceso a educación de calidad en el Gran Guayaquil. La Ecotec fue creada para formar profesionales que tengan una visión humanista y de responsabilidad social corporativa.
- ¿Cuánto creció la universidad en más de una década que usted la estuvo dirigiendo?
- Iniciamos en 2007 como el Tecnológico Ecomundo, en las instalaciones del colegio del mismo nombre, ubicado en la avenida Juan Tanca Marengo. En el 2009 adquirimos el terreno de Samborondón y en 2013 hicimos realidad ese campus. En el 2019 inauguramos un nuevo campus en la vía a la costa. Comenzamos con 400 estudiantes y ahora existe una comunidad universitaria que sobrepasa las 6.500 personas. Tenemos ofertas de grado y posgrado. La universidad ha ido creciendo en la medida de las necesidades y para dar respuesta a la demanda de los bachilleres de encontrar una universidad que les sea accesible y más atractiva desde el punto de vista académico.
- ¿A qué atribuye la confianza de los jóvenes de querer estudiar en esta universidad?
- Aquí ellos tienen una formación de calidad y más del 90 % de nuestros graduados tiene empleo vinculado a su profesión. Eso es un indicador de que estamos haciendo las cosas bien.
- Las universidades del país vivieron momentos duros con los cambios en la nueva Ley de Educación Superior. ¿Cómo los afrontó la Ecotec?
- Recién creada, nos tuvimos que enfrentar al Mandato 14 constituyente, que dispuso la evaluación de desempeño de todas las universidades. Nuestro modelo educativo logró obtener una calificación que nos permitió madurar más rápido. Después tuvimos que enfrentarnos al proceso de acreditación, del que salimos airosos. El ataque constante a la autonomía universitaria fue otro episodio fuerte.
- ¿Cómo trabajó para lograr esa anhelada autonomía?
- Con la innovación, creando carreras que consideramos que deben ser del futuro. Tenemos Ingeniería Agrónoma e Industrial y estamos trabajando dentro de la Ingeniería en Sistema, con Software y Programación. Está en oferta la carrera de Psicología, se aprobó la de Enfermería y está en aprobación la de Criminalística. Estamos creando las bases para tener una facultad de Ciencias de la Vida y Desarrollo Humano. Está en proyecto la creación de carreras relacionadas con el envejecimiento de la población, como trabajo social vinculado a la gerontología, fisioterapia o kinesiología. Y tenemos que apuntar a las ingenierías, como la geofísica.
- ¿En qué área puso mayor énfasis su administración?
- En el crecimiento de la infraestructura para que todos se sientan cómodos; en el desarrollo académico, de la docencia, investigación y vinculación con la comunidad. Tenemos 14 maestrías funcionando con más de 1.500 alumnos, 20 carreras en cinco facultades y una escuela de posgrado. Hay 33 maestros PhD y 35 en proceso de formación, con una planta docente de 215. El 50 % de ellos son titulares y realizan publicaciones indexadas, dan clases, consultorías y hacen vinculación. Tenemos 10 proyectos de investigación funcionando.
- ¿Qué cree que le faltó hacer?
- Me faltó tiempo para insertar a la universidad a nivel internacional. Había que crear una institucionalidad interna y buenas bases para salir a competir después. Por muchas razones coyunturales tuvimos que enfrascarnos en sobrevivir mucho tiempo y no tuvimos tiempo para hacer que la universidad trascienda las fronteras del Ecuador. También nos faltó ofrecer un programa online de excelencia y crear una universidad que salga al mundo, que ayude a los ecuatorianos que están fuera del país. Creo, además, que nos faltó crecer mucho más rápido en infraestructura, pero la crisis nos afectó a todos.
- ¿Está satisfecho del trabajo que ha realizado?
- Satisfecho sí, por el equipo que logré armar y el apoyo que me dieron todos, pero considero que pude haber hecho mucho más. No me siento conforme porque siempre hay que tener el deseo de seguir haciendo. Aquí no hay logro individual, todo lo conseguido se debe al equipo que se formó.
- ¿Cuál considera que es su mayor logro?
- El mayor logro que nadie podrá quitarme es el reconocimiento de esos jóvenes que uno ayuda a graduar.
- ¿Cuál será su futuro ahora que deja el rectorado?
- Seguir apoyando a la Ecotec. Nunca dejé de dar clases, soy profesor titular del área de posgrado y sigo investigando.