Sofía Almeida, dos años más en el poder

Contra viento y marea. En una rápida pero apretada votación, Sofía Almeida Fuentes se consolidó en el Consejo de Participación Ciudadana y Control (CPCCS). Con cuatro votos a favor (incluido el suyo) y tres en contra, fue reelecta presidenta del organismo, en medio de voces de respaldo y rechazo a un organismo que consideran debe desaparecer o limitarse en sus competencias.

El evento se desarrolló la noche del domingo 13 de junio de 2021, con la presencia de los siete consejeros, en una sesión extraordinaria que trató únicamente la elección de sus nuevas autoridades, para el período 2021-2023.

Zobeida Aragundi, vocal de la Comisión Nacional Anticorrupción Capítulo Guayas (CNA-CG), explica que reglamentariamente correspondía renovar la presidencia del CPCCS, pero aclara que lo del domingo no fue una reelección para Almeida. “La primera vez, ella no fue reelegida (...) ejerce la presidencia en reemplazo del titular porque ejercía la vicepresidencia del Consejo de Participación Ciudadana. La elección de ella recién se dio ayer (domingo)”, esclarece la vocal.

El 16 de octubre de 2020, Almeida asumió la presidencia del CPCCS en reemplazo de Christian Cruz, quien fue destituido por la Asamblea Nacional, por varias causales; entre ellas, la obtención de su carné de discapacidad. Cruz, a su vez, asumió el cargo en reemplazo de José Tuárez Zambrano, quien cumple una condena de cinco años de cárcel, por el delito de tráfico de influencias para la venta de cargos públicos.

La consejera Ibeth Estupiñán mocionó a Almeida para que continúe en esas funciones, lo que fue apoyado por los consejeros David Rosero, Juan Dávalos y la propia Almeida.

“Es el tiempo de las mujeres”, dijo Estupiñán previo a las votaciones de sus colegas, las mismas que favorecieron en la elección de David Rosero como vicepresidente del organismo, en reemplazo de Francisco Bravo.

Aragundi considera correcta la elección en el sentido de paridad de género y alternancia; sin embargo, repara que eso no consolida ni fortalece en nada al CPCCS. “No considero que sea un fortalecimiento o una aprobación o aceptación del organismo como para que continúe en la institucionalidad del país, fue simplemente haber cumplido la renovación de su directorio (...) Medio país se ha manifestado para que el organismo desaparezca, que sea eliminado de la institucionalidad del Ecuador”, señala la vocal. Considera además que se debe buscar un mecanismo para limitar las competencias del CPCCS. Quitarle las de designación de autoridades de control y dejarle solo con las de transparencia. “A mí me parece que más se han dejado ver, en sus aciertos o desaciertos en sus primeras competencias; y, en la segunda, tienen mucho que debernos al país”.

En marzo de 2020, días previos a la emergencia sanitaria que se decretó por la pandemia de la COVID-19, Pablo Dávila, del Comité por la Institucionalización Democrática, dio a conocer al Consejo Nacional Electoral (CNE) sobre la recolección de firmas para eliminar al CPCCS, lo que no pasó en la anterior Asamblea Nacional. Este Diario llamó a Dávila para conocer su postura respecto de la elección de Almeida, pero hasta el cierre de esta edición no respondió las llamadas telefónicas ni mensajes vía WhatsApp.

Posturas

Compromiso para mejorar

Tras su elección, Almeida se comprometió a trabajar en conjunto y a tomar las opiniones y posturas de sus compañeros, con algunos de los cuales ha tenido serias diferencias. Al respaldar su moción, David Rosero lo hizo “en función de que se bajen los niveles de conflictividad, en función de que podamos realizar una nueva página en la historia del Consejo de Participación donde todas y todos participemos (...)”.

La cifra

Tres consejeros de los 7 del CPCCS se abstuvieron de votar por Sofía Almeida.