Francisco Huerta, un apasionado por la política
Su fallecimiento deja un gran vacío en la política, pero también en la empresa Gráficos Nacionales, en la que trabajó en dos etapas
Francisco Huerta Montalvo, el liberal radical, rebelde, el que nunca dejó de alzar su voz de protesta contra las tiranías y las arbitrariedades a pesar de las consecuencias que aquello tuviera para él, descansa en paz en su última morada, el Panteón Metropolitano de Guayaquil, pero sus ideas y pensamientos quedan plasmados en su columna Cañón de Futuro, de EXPRESO, el diario del que fue subdirector hasta el día de su deceso. Pero también deja para la posteridad los cientos de discursos que pronunció y las innumerables entrevistas que concedió a los medios de comunicación.
Múltiples reacciones de pesar por el deceso del doctor Francisco Huerta
Leer másEn su espacio dominical, en el que se publica este 3 de julio de 2022 su último texto, el que dictó a su esposa en su lecho de muerte, está la esencia de su pensamiento de unidad y de lucha común por los intereses nacionales y regionales. Porque así era Francisco Huerta, el médico, el político, el diplomático, el pensador, el analista, el hombre sencillo y de mente brillante que murió a los 82 años, con la ilusión de que su voz, a través de sus escritos, siguiera retumbando en la esfera pública.
El último discurso que pronunció hace diez días, con la voz compungida por la muerte de su entrañable amigo Galo Eduardo Martínez Merchán, arrancó lágrimas de dolor entre los concurrentes a la misa fúnebre. Es que Francisco Huerta (nació el 18 de junio de 1940) tenía una oratoria brillante, de la que hizo gala desde joven, pues creció en una familia de pensadores y políticos, miembros del hoy extinto Partido Liberal Ecuatoriano. Fue en esa agrupación que inició su carrera política que lo llevó a ocupar múltiples cargos públicos. Fue concejal de Guayaquil, alcalde de la misma ciudad, ministro de Salud en el gobierno de Osvaldo Hurtado, ministro de Gobierno en el régimen de Gustavo Noboa. Pero también fue candidato a la presidencia de la República en 1984 por el partido Demócrata, que él fundó después de que fuera expulsado del Partido Liberal porque no estaban de acuerdo con sus ideas progresistas.
Jamás calló ante los atropellos ni los actos de corrupción porque creía que hacerlo era fallarse a sí mismo. Por eso, se declaró constitucionalista cuando en 1970 el presidente José María Velasco Ibarra se declaró dictador, y eso lo sacó en un día de la Alcaldía de Guayaquil que él había ganado limpiamente en las urnas. Y tampoco guardó silencio cuando se enteró de la sospechosa compra de radios walkie talkie Motorola que había hecho el ministro de Defensa, en víspera de Navidad, para las Fuerzas Armadas. Su osadía le costó dos meses de prisión en un cuartel militar de la Amazonía por orden de la dictadura del general Guillermo Rodríguez Lara, que lo acusó de organizar protestas en contra del régimen militar.
Es que Francisco Huerta, un doctor en Medicina y Cirugía de la Universidad de Guayaquil, fue de esos políticos puros que usaron la política con el afán de servir. Y empezó sirviendo, en sus tiempos de estudios, como presidente de la Asociación Escuela de Medicina, de la Universidad de Guayaquil, y después como presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE).
Son diversas las funciones públicas que desempeñó a lo largo de su vida política, entre las que destaca el haber sido el comisionado coordinador de la Comisión Transparencia y Verdad del caso Angostura (ataque de Colombia a una base guerrilla en territorio ecuatoriano), y como tal anunció, en el año 2009, que el país estaba camino a convertirse en una narcodemocracia. Y tal vez, no se equivocó en su análisis, por los duros momentos de crisis e inseguridad que vive en país.
Francisco Huerta, padre de cuatro hijos, fue además director de cooperación y coordinación institucional del Consejo Nacional de Educación Superior del Ecuador (Conesup); vicepresidente del Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS); miembro de la Junta Consultiva del Ministerio de Relaciones Exteriores del Ecuador; secretario ejecutivo del Convenio Andrés Bello; representante del Ecuador ante la Asamblea de las Naciones Unidas y vicepresidente de la misma; embajador extraordinario y plenipotenciario del Ecuador ante el Gobierno de Venezuela; coordinador del Programa Nacional de Ciencia y Tecnología del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) con el Banco Interamericano de Desarrollo; y presidente de la Comisión Medidas de Confianza Mutua y Seguridad, que en Santiago de Chile negoció los acuerdos de paz con el Perú.
Fallece Francisco Huerta Montalvo, subdirector de diario EXPRESO
Leer másEn el campo académico, fue profesor de Política de Empresas en la Maestría de Gestión de Proyectos de la Escuela Politécnica Nacional, y miembro de la Junta Consultiva y profesor de la Universidad Casa Grande; rector de la Academia Juan Montalvo: la Universidad de los Barrios y director de la Iniciativa Bicentenario.
Su fallecimiento deja un gran vacío en la política, pero también en la empresa Gráficos Nacionales, en la que trabajó en dos etapas, en la primera en Quito, como director regional, y después en Guayaquil, como analista y subdirector de Diario EXPRESO. ¡Paz en su tumba!
CONDECORACIONES
- Hipólito Unanue, al Mérito en Salud Pública, concedida por el Gobierno de Perú.
- Antonio José de Sucre. Fue entregada por el Gobierno de Cumaná, Venezuela.
- Francisco de Miranda, otorgada por el Gobierno de Venezuela.
- Orden Nacional al Mérito en el Grado de Gran Comendador, concedida por el Gobierno ecuatoriano.
- Condecoración Vicente Rocafuerte, conferida por la Asamblea Nacional del Ecuador.