Tener una franquicia no es ganarse la loteria

Abrir un negocio es un sueño de muchos, quienes están en este camino tienen la opción de adquirir una franquicia; un modelo que asegura una rentabilidad por ser ya una marca reconocida y por saber cómo satisfacer las necesidades del cliente.

Sin embargo, “tener una franquicia no implica haberse ganado la lotería”, advierte el ingeniero Edmundo Kronfle, franquiciado de Dunkin’ Donuts en Ecuador, gestor de la marca Pingüino.

Kronfle explica que el franquiciado debe trabajar más que si fuera el dueño de la marca, pero lo bueno es que se consigue la rentabilidad anhelada.

Bajo su experiencia, de tener a Dunkin’ Donuts por 25 años en Ecuador, con 15 locales, dice que detrás de una marca hay trabajo, inversiones y sacrificio. No se puede pensar que por el hecho de tener el permiso de usar una marca va a empezar a llover el dinero.

Hay requisitos que se deben cumplir, para no perder la inversión y por ello es mejor tomar en cuenta lo que sugieren los expertos.

William Le Sante, managing director & CEO de Le Sante, pone de ejemplo que se debe seleccionar la franquicia según sus propias circunstancias de vida: “Asesoraba a una señora que quería adquirir una franquicia al sur de Miami, era un negocio para vender desayunos. Le dije que la pasaría viendo a las 4:00 de la madrugada, para visitar tres negocios disponibles. Era necesario hacerlo para ver qué movimiento tenía la franquicia y dijo que no podía salir a esa hora”, relata.

Entonces concluye haciendo una pregunta: ¿cómo la señora iba a adquirir una franquicia que vende desayuno, sin querer madrugar?

El ejemplo es claro, hay que tomar en cuenta el concepto de la franquicia y ver si se ajusta a lo que se busca y a la circunstancia de vida.

Otro punto es que antes de traer una nueva franquicia al país se debe hacer una investigación de mercado. Por ejemplo, si se quiere traer un negocio de hamburguesas se debe tener bien claro qué es lo nuevo que va a ofrecer, “lo diferente a las marcas que ya están en el país”.

Es importante también tomar en cuenta el tiempo de dedicación que exige la franquicia. Por ejemplo, en Argentina había una persona dispuesta a invertir unos 3 millones de dólares en una franquicia, pero decía que no tenía tiempo para ir a Estados Unidos, para una capacitación de seis semanas.

Además de esto, se debe saber que las franquicias de Estados Unidos tienen un estudio de los casos de fracasos y este es entregado a quienes desean adquirir el permiso para usar una marca. William resalta que la franquicia que no entrega ese estudio no es de confiar y en ese caso es mejor buscar otra.

Estas consideraciones de las se habla en la Expo USA 360°, van más allá de los estudios legales y de mercado, tienen que ver con la entrega, tiempo y sacrificio que la persona quiere dar a la franquicia.

En cuanto al precio de las franquicias disponibles en Ecuador, Guido Santillán, director de Ecuafranquicias, dijo a Diario EXPRESO que en el país hay desde 25.000 dólares y que se está trabajando para crear más marcas nacionales. “Hay casos de éxito que incluso ya se han exportado, un ejemplo es Disensa, tiene 1.600 franquicias en América Latina, de los cuales 500 están en el país. Esta es una franquicia ecuatoriana”, manifiesta Santillán.

Referente a los planes de Dunkin’ Donuts, su gerente general, Mauricio Calero, indica que se está conversando con la franquicia la posibilidad de abrir subfranquicias en ciudades que no sea Guayaquil y Quito.

Al final la conclusión de los expertos es que optar por una franquicia es más seguro que emprender. En el primer modelo hay un negocio que ya se ha probado. Santillán dice que un 60 % de los emprendimientos cierran en el segundo año y por ello es mejor optar por la franquicia.