El FUT se desliga de los actos violentos y anuncia nuevas acciones contra el gobierno
La manifestación del jueves 22 de octubre fue calificada como un éxito. Los dirigentes presentarán dos proyectos de ley
Ellos convocaron la protesta, lideraron la marcha y, sin embargo, no se consideran responsables de los actos de violencia y de los daños causados ayer, 22 de octubre de 2020, en Quito. Los dirigentes del Frente Unitario de Trabajadores (FUT) creen que las manifestaciones en contra del gobierno del presidente Lenín Moreno y su acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) fueron un éxito y se mantuvieron pacíficas. Algo que no es del todo cierto.
Mesías Tatamuez, principal sindicalista del FUT, dijo que los enfrentamientos violentos fueron actos aislados de personas que no tienen relación con ellos. De nuevo, hablaron de infiltrados que no pudieron identificar en las marchas de ayer, por el Centro Histórico de la capital.
En la conversación con medios de comunicación, los dirigentes anunciaron nuevas acciones en las calles y en otros espacios. Hablaron de la redacción de dos leyes: un nuevo Código del Trabajo y una nueva normativa de Seguridad Social. En esos documentos, dijo Tatamuez, se contemplarán todos los derechos de los trabajadores ecuatorianos.
El 29 de octubre, en cambio, acudirán ante la Corte Constitucional para cuestionar las decisiones laborales del actual gobierno.
En noviembre también habrá encuentros que podrían terminar en nuevas manifestaciones. El 28 de ese mes se analizará la situación del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) y su banco.
Luego de agradacer a los asistentes a la marcha del jueves, los dirigentes no descartaron una nueva manifestación. "Sino hay justicia, nos quedan las calles", afirmó Tatamuez luego de confirmar que existió una contradicción entre el Municipio de Quito y el Ministerio de Gobierno.
María Paula Romo y Jorge Yunda, según el sindicalista, se acusaron de cerrar las calles para evitar el avance de la marcha.
Finalmente, los integrantes del FUT calificaron de 'campaña sucia' a las afirmaciones del gobierno que anunciaron una protesta violenta similar a la de octubre del año pasado.
