Diligencia. El exvicepresidente Jorge Glas acudió ayer a la audiencia de apelación de la sentencia de seis años que recibió por el caso Odebrecht.

Glas insiste en su inocencia por los sobornos de Odebrecht

33,5 millones en coimas habría entregado Odebrecht en Ecuador a funcionarios entre 2007 y 2016.

Con el convencimiento de que es inocente y un perseguido político, Jorge Glas, exvicepresidente de la República, volvió ayer a un tribunal penal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ).

En diciembre de 2017 él y otras siete personas fueron condenadas a seis años y a 14 meses de cárcel por asociación ilícita en el caso de la trama de sobornos de Odebrecht.

Seis de los sentenciados apelaron el fallo y ayer fundamentaron su pedido de revocatoria del fallo de primera instancia.

Falta de motivación, violación de derechos fundamentales, tribunal parcializado, negativa del derecho a la defensa, ausencia de valoración de la prueba, la no aplicación del principio de favorabilidad. Fueron entre otros los argumentos con los cuales los defensores buscaron la anulación de la sentencia y la ratificación de la inocencia de sus defendidos.

Aunque el juez David Jacho estableció reglas y tiempo de 20 minutos para sus intervenciones y la sustentación de los recursos, los defensores se tomaron hasta 50 minutos.

En esta ocasión, Glas contó con el patrocinio de tres abogados: Alejandro Vanegas, Harrison Salcedo y Eduardo Franco. Vanegas argumentó que jamás firmó contratos, que se lo condenó con un código derogado, aseguró que el tribunal atropelló el debido proceso y pidió que se lo declare inocente.

Aníbal Quinde, defensor de Ricardo Rivera, tío del vicepresidente Glas, afirmó que los actos de su cliente jamás constituyeron una conducta penalmente relevante y que él solo fue un gestor de negocios.

Víctor Velástegui, abogado de Ramiro Carrillo, argumentó que el exgerente de transporte de Petroecuador no estuvo en capacidad para favorecer a Odebrecht.

El fiscal Paúl Pérez Reina hizo un recuento de cómo se configuró el delito en la contratación de los cinco proyectos emblemáticos del anterior Gobierno. En la réplica a los defensores insistió en que se ha probado la existencia del delito, la responsabilidad de los procesados. Reiteró que se respetó el debido proceso y se aplicó el principio de favorabilidad.

Julio Sarango, abogado de César Montúfar, el acusador particular, ratificó que los jueces resolvieron sobre la base de la prueba presentada.

Para apoyar a Jorge Glas estuvieron en la sala su hermano Heriberto, asambleístas correístas como Sofía Espín, Soledad Buendía, el excanciller Ricardo Patiño y simpatizantes.

En los exteriores de la Corte medio centenar de personas proclamaba la inocencia del exvicepresidente Glas, gritaba consignas en contra del presidente Lenín Moreno, a quien llamaron traidor. No faltaron insultos para la asambleísta de CREO Ana Galarza, quien se presentó en la diligencia. Antes de las 18:00 se suspendió la diligencia. Los jueces convocarán oportunamente a la lectura de la resolución.

En Guayaquil

Ricardo Rivera, Carlos Villamarín y Képler Verduga siguieron la audiencia de apelación desde el Centro Regional de Guayas a través de una videoconferencia. Los tres sentenciados estuvieron en una sala del centro carcelario vestidos con sus trajes anaranjados y siguieron la diligencia por una pantalla.

Seguridad

Decenas de vallas del Ministerio del Interior rodearon los accesos a la Corte Nacional de Justicia. Policías antimotines y del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) acudieron a reforzar la seguridad en los exteriores y en el octavo piso del organismo, en donde se desarrolló la audiencia de apelación.

Protección

Ayer el exvicepresidente Jorge Glas llegó a la Corte con la custodia de los guías penitenciarios y sin la vigilancia de los efectivos que estuvieron asignados a su cuidado. El martes el Gobierno le retiró la seguridad asignada en el decreto que firmó el expresidente Rafael Correa 21 días antes de irse.

Casación

Con la resolución de la apelación de la condena, los procesados todavía pueden presentar el recurso de casación para que sea una tercera instancia la que resuelva el caso. El recurso se tramita ante la misma Corte Nacional, pero con un tribunal distinto al que resolvió el recurso.