El Guayas siempre fue su meta
Este Buque Escuela es para todos los ecuatorianos la ‘Blanca Dama’, que va más allá, trasciende fronteras, es el representante del Ecuador y hay que dedicarle mayor tiempo y esfuerzo”.
Recuerda la emoción al visualizar tierra. Todos querían binoculares para ver la orilla australiana al llegar. Imponentes veleros acompañaban el escenario. Estaban allí por ellos, incluso por él, un entusiasta guardiamarina de apenas 21 años.
Fueron recibidos como deportistas de gran prestigio. “Teníamos la opción de entrar a cualquier espectáculo, disfrutar su gastronomía y observar su cultura”, recuerda el comandante Ricardo Unda de la experiencia más inolvidable, su crucero de instrucción.
Aquella emoción de representar a un país en un viaje internacional renació el 18 de enero, cuando recibió la tarea de comandar el Buque Escuela Guayas, tras el cambio de mando que sustituyó al comandante Walter Gómez.
“En todas las actividades dentro de la institución, como oficiales debemos sacrificar nuestro tiempo personal para cumplir nuestro deber profesional. Este Buque Escuela es para todos los ecuatorianos la ‘Blanca Dama’, que va más allá, trasciende fronteras, es el representante del Ecuador y hay que dedicarle mayor tiempo y esfuerzo”.
Habla con pasión. Y no es para menos, pues comandar el Buque siempre estuvo dentro de sus objetivos. Esta responsabilidad es el faro que guía su dedicación en este nuevo periplo.
Cuando el comandante Unda habla de “todas las actividades de la Armada”, lo hace en serio. Ha sido un oficial que ha laborado en buques de la escuadra naval, ha sido jefe de operaciones, director de personal de la Armada y de la Escuela de Capacitación y Perfeccionamiento... Esta es su tercera vez como oficial de planta del Guayas.
Ha dedicado su vida a la Marina. Incluso cursó la secundaria en el Liceo Naval. Es la sangre. Su hermano también se dedicó a esto y luego de verlo ingresar a la Escuela Superior Naval, él siguió sus pasos en la carrera naval militar. También de su tío viene la pasión. El almirante Hugo Unda Aguirre fue comandante general de la Armada, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y ministro de Defensa.
De sus navegaciones más difíciles recuerda aquella ocasión en que se fue a la costa oeste del Pacífico, en Acapulco. Estaban por zarpar de retorno y existían las condiciones meteorológicas para el caso, pero el viento comenzó a cambiar. “El comandante decidió zarpar bordeando la costa, pero el temporal nos alcanzó y estuvimos un día entero moviéndonos en el mismo sitio”, relata.
Lo último en lo que se piensa en un momento como ese es en el miedo a la muerte. “La prioridad es el personal y el buque, mantener todo a salvo”.
Con esa sobriedad dirige ahora el Guayas, luego de que el año pasado hiciera el curso de ocho meses del Estado Mayor Conjunto, para coroneles o capitanes de navío, un requisito propio de su carrera.
Si no se hubiera dedicado a la navegación, probablemente sería futbolista. Cuando creció en los bloques del Seguro, en toda la avenida Quito y Venezuela, su padre, Nelson Unda, trabajaba en la Empresa Eléctrica y tenía como jefe a George Capwell. Allí tuvo la oportunidad de practicar ese deporte. Y allí también se hizo hincha de Emelec.
Aún juega por diversión. Como es comandante, nadie se le acerca a tres metros y puede “maniobrar fácil”, reconoce entre risas.
Ya en infidencias, admite que en su hogar la capitana es su esposa, Anabelle Vaca. “Es que hay que mantener el equilibrio. Allá soy el condescendiente”. Es bastante hogareño. “Demasiado para mi señora”, ríe de nuevo. Ama estar con sus hijos en casa. Tiene tres: Anaís Estefanía (de 18 años), Ricardo Andrés (17) y Josué Ricardo (15). De vez en cuando, funge de su profesor de física y matemáticas. Se lo permite el título de ingeniero en Computación que adquirió hace años en la Espol.
Este comandante mira el faro una vez más. Ahora su objetivo es representar de manera adecuada al país y tener la satisfacción de que las familias los esperen con una sonrisa cuando, en octubre próximo, regresen de un viaje de siete meses que emprenderán en marzo.
Un recorrido por América Latina
La agenda de este 2018 para el Buque Escuela Guayas la protagoniza un compromiso internacional de grandes veleros. Es una actividad que se lleva a cabo cada cuatro años.
Esta edición la organiza la Armada de Chile. Se trata del Velas Latinoamérica 2018, que también hará estación en Guayaquil. El Guayas, que saldrá el 21 de marzo, avanzará a Perú, Panamá, Colombia, Venezuela, República Dominicana, México y tiene previsto el retorno para el 2 de octubre.
La preparación del equipo, por ahora, consiste en alistar la embarcación con trabajos de ingeniería en acondicionadores de aire, cocina y máquinas, así como la preparación logística de operación y maniobras.