Guillermo Lasso predica al gabinete su propio Código de Ética

Empezó haciéndoles varias advertencias. El presidente electo Guillermo Lasso tiene prácticamente definido al 90 % del gabinete ministerial con el que arrancará su gestión el 24 de mayo próximo, día en que será posesionado por la Asamblea Nacional.

El futuro mandatario hizo públicos ayer nuevos nombres de su equipo de trabajo, que se va configurando con siete mujeres y 15 varones, cuando solo le resta designar al ministro de Gobierno, cargo para el que suena el asambleísta César Monge; al titular de la Secretaría Jurídica de la Presidencia; y al secretario o secretaria general de la Presidencia.

La revelación de los nuevos funcionarios se hizo en Guayaquil. Lasso los juntó con los ministros del sector social, que fueron anunciados a finales de abril, porque les tenía varios mensajes. El más relevante tuvo que ver con el Código de Ética que deberán seguir mientras sean parte del Gobierno.

¿Qué contiene este documento? La primera disposición, “aunque obvia pero siempre incumplida”, es que ningún ministro o secretario de Estado contrate o tenga trabajando a sus parientes y familiares en la Función Ejecutiva, al menos mientras sean funcionarios gubernamentales.

No es la única norma a seguir. Otra de las medidas dispuestas por Lasso es que no se cuelguen en las paredes de ministerios y entidades públicas su fotografía. En su lugar, propone que se expongan las imágenes de ecuatorianos destacados, paisajes del país y los logros que vaya alcanzado su gestión hasta 2025.

No habrá festejos personales en las oficinas públicas ni estará permitida la recolección de cuotas o donaciones para comprar regalos a los ministros o funcionarios de alto rango. El presidente no aceptará regalos que superen los $ 100, “sea de ciudadanos ecuatorianos o delegaciones extranjeras”, puntualizó el futuro jefe de Estado.

Lasso tiene previsto reunirse hoy con la comandante general de la Policía Nacional, Tannya Varela, en Quito. En el encuentro, aprovechará para pedirle un inventario de los automóviles, motocicletas y efectivos de la Policía Nacional que están a cargo del cuidado de funcionarios públicos.

“A muchos de los cuales los ciudadanos no los conocen, menos pudieran atentar contra su seguridad. Sin embargo, estamos dilapidando recursos que deben estar destinados a cuidar la seguridad de los ciudadanos, en simplemente cuidar la vanidad de funcionarios”, argumentó Lasso.

En la lista de nuevos ministros destacan algunos cuadros del movimiento CREO, como Tanlly Vera y Patricio Donoso, que hasta el 14 de mayo pasado fueron legisladores por esa organización política. Similar situación a la de Mae Montaño, quien, aunque se desafilió de CREO, se mantenía cercana a este movimiento.

Los nuevos ministros ya tienen algunas tareas que deberán cumplir aunque, como les advirtió el propio Lasso, lo harán con un Estado prácticamente sin dinero, por lo que deberán ingeniárselas para cumplir con las metas planteadas.

A Roberto Salas, por ejemplo, le adelantó que su misión primordial será “romper las cadenas de la corrupción en la comercialización del petróleo ecuatoriano” y lograr la eficiencia del sector. El nuevo funcionario se comprometió a duplicar la producción.

Al futuro canciller Mauricio Montalvo lo comprometió a mejorar el servicio que se presta en el exterior a los ecuatorianos y dispuso que las embajadas y consulados trabajen las 24 horas del día, los siete días de la semana.

Pero la tarea no solo será a favor de los compatriotas en el exterior, dijo Lasso. El Ministerio de Relaciones Exteriores deberá procurar la regulación e inserción social, económica y laboral de los ciudadanos extranjeros que huyen de sus países por diferentes motivos, especialmente de los venezolanos.

Aunque no era la primera vez que lo decía, Lasso insistió ante el ministro de Turismo, Niels Olsen, en la necesidad de recuperar y reactivar el tren y el transporte aéreo, y abrió las puertas a que la inversión privada pueda participar en estos procesos.

Pese a las dificultades económicas con las que recibirá el país de manos de Lenín Moreno, Lasso les dijo a los nuevos ministros que se les está dando una valiosa posibilidad de servir a los ecuatorianos. “Estaré atento de ver si alguien desperdicia esta oportunidad de servir. No lo hagan”, advirtió el mandatario electo.

Brevemente, aunque sin mencionarlo explícitamente, volvió a tocar el tema del acuerdo fallido con el Partido Social Cristiano (PSC) y la alianza Unión por la Esperanza. Dijo que no llegó a la Presidencia para ceder ante la corrupción o la impunidad y puso en manos de los ministros la responsabilidad de demostrar al país que hizo lo correcto.