Hay ventas que se disparan con el calor y las lluvias
En varias de las esquinas de la avenida 9 de Octubre, entre García Avilés y Rumichaca, un grupo de vendedores no sabía ayer sobre el pronóstico del tiempo que el Inamhi había hecho para este día: probables lluvias aisladas.
Pero, por el fuerte sol que cayó desde las primeras horas sobre la ciudad, ellos preveían que la jornada terminaría con agua.
Es por eso que a las 10:30 ya tenían, junto a los caramelos y cigarrillos, paraguas que ofrecían por cinco dólares.
“Estas cosas se venden mejor si llueve”, dijo Segundo Freire, uno de los comerciantes que regularmente ofrece empanadas precocidas al pie de uno de los almacenes de electrodomésticos en esa zona. “Justo para enero compro una docena de paraguas en una de las distribuidora de la calle Aguirre. Cuando los termino, voy por otra docena”.
Un movimiento similar -renovación de productos- se observó en las 17,5 hectáreas en las que se expande el comercio de la Bahía.
Entre la diversidad de artefactos, calzados y ropa que se ofertan en los 6.648 puestos, ayer unos cuantos comerciantes acomodaban desde ventiladores hasta impermeables.
Uno de ellos es Gustavo Gualpa, quien armaba alguno de los 30 ventiladores, de todo tamaño, con los que llenó su local.
“Todo depende que así como dicen que va a llover, haga calor”, agregó este comerciante, quien se quejó de los costos de estos artefactos. “Si el año pasado uno de estos costaba 15 dólares, ahora está por los 25”.
En otro lado, quien creyó en los anuncios de que este año el invierno sería de muchas lluvias -por el evento El Niño-, es Avelino Chang, un comerciante guayaquileño que mandó a confeccionar 500 piezas de impermeables. “Una parte las venderé en mi local, la mayor parte la distribuiré entre los locales de aquí”.
Aunque el pronóstico de que sería un evento El Niño de los más fuertes se atenuó en algo, él cree que venderá una parte de estos artículos. Lo que reste, lo guarda para el próximo invierno.
Los almacenes chinos del centro y de la misma Bahía colocaron en la estantería desde paraguas hasta sombreros.
En uno de ellos, Comercial Zhang, se abrió espacio para los cinco mil sombreros -para hombre y mujer- que esperan vender en estos días de mucho sol.
Productos importados
Ventiladores, con más oferta
El ventilador (de mesa, pedestal y de techo), es precisamente uno de los productos que mayormente se importó el año pasado: 1.088,06 toneladas. Casi el doble de lo que se trajo para comercializarlo en el mercado local en el 2014.
Otra historia es lo que sucedió con los paraguas. El 2014 se importaron 844,7 toneladas, mientras que el año pasado esa cifra decreció a 639,3 toneladas.
En cuanto a la importación de calzado impermeables, hubo un aumento del 21,2 % el último año. Se comercializó 261,6 toneladas de este tipo de artículos.