El historico Independiente
América se rindió ante Independiente del Valle en el presente año. Este equipo ecuatoriano, con apenas siete años en la Primera División, dio el campanazo al llegar a la final de la Copa Libertadores. Los en ese entonces dirigidos por el uruguayo Pablo Repetto tuvieron que luchar desde el repechaje para llegar a las instancias finales del torneo. Así fue que dejaron fuera al Guaraní paraguayo y llegaron a la fase de grupos.
En las llaves les tocó con los poderosos Atlético Mineiro brasileño y Colo Colo chileno, además del Melgar peruano. Independiente clasificó segundo luego de un épico 0-0 ante el ‘Cacique’ de visitante, en el que el guardameta Librado Azcona ya se mostraba como uno de los héroes de Sangolquí.
En la siguiente fase jugó contra el linajudo River Plate, campeón de la Copa Libertadores del año anterior. Una victoria 2-0 en un Olímpico Atahualpa abarrotado de gente gracias a la iniciativa de donar la taquilla a los afectados por el terremoto que golpeó a Ecuador el 16 de abril, empezó a cimentar la clasificación, que selló al caer solo 1-0 en el Monumental de Núñez.
En cuartos de final, dejó fuera al Pumas mexicano tras una agónica definición por penales. El siguiente obstáculo fue Boca Juniors, equipo argentino al que le ganó en Quito 2-1 y en la histórica Bombonera 2-3.
Ya en la final ante Atlético Nacional, Independiente empató 1-1 en el estadio Atahualpa, en el que por cuarta vez donó la taquilla a los damnificados, pero una apretada derrota en Medellín por 1-0 lo alejó del cetro. Sin embargo, el mundo se enteró de que había en Ecuador un equipo que con base en fútbol y corazón llegó a puestos insospechados.
La deuda eléctrica
Un golpe de autoridad a nivel internacional sigue siendo la deuda de Emelec. En el presente año no pasó de la fase de grupos en la Copa Libertadores de América, donde se midió al Pumas mexicano, Deportivo Táchira de Venezuela y el Olimpia paraguayo. También le fue esquiva la reivindicación en la Copa Sudamericana, en la que a pesar de superar al Universitario peruano, fue eliminado por el Deportivo La Guaira de Venezuela.
Un duro golpe
Barcelona no pudo certificar la buena campaña a nivel local en la Copa Sudamericana, torneo del que fue eliminado de forma prematura. Los canarios, que aparecían como favoritos en la llave frente al Zamora venezolano, quedaron fuera del torneo continental tras un pobre empate 1-1 en el estadio Monumental y un idéntico marcador en el juego de vuelta. Todo se definió por la vía de los penales, en la que los toreros fueron ineficaces.
Desolación alba
Liga de Quito no ha sido capaz de reeditar en la Copa Libertadores de América su título conseguido en el 2009. En el presente año se enfrentó en la fase de grupos al Gremio brasileño, Toluca mexicano y San Lorenzo de Argentina, pe los albos no pudieron pasar a la siguiente ronda. Claudio Borghi fue el técnico de los azucenas en el torneo continental y la mala participación en el mismo fue uno de los motivos para su destitución.
Fin a la ilusión
La Universidad Católica había conseguido un empate 1-1 en la ida ante el Deportivo Independiente de Medellín y aquello significaba que con un empate sin goles en el Atahualpa los camaratas avanzaban a la siguiente ronda de la Sudamericana. Sin embargo, la derrota por 1-0 frente a los colombianos terminó con la ilusión del ‘Trencito Azul’.
Tristeza oriental
Los hinchas de Aucas querrán olvidar el 2016, no solo porque su conjunto descendió a la Serie B en el campeonato nacional, sino que tampoco pudo pasar a la siguiente fase en la Copa Sudamericana. Los orientales se midieron al Real Garcilaso peruano, elenco que los dejó fuera de competencia tras vencerlos 1-0 como dueño de casa.
