Incendios en Ecuador: ¿Qué hay detrás de la mente de un pirómano?

En las últimas semanas, Quito y varias provincias de la Sierra han enfrentado incendios forestales de gran magnitud, muchos de los cuales han sido provocados intencionadamente. Este fenómeno, conocido como piromanía, va más allá de un simple acto de vandalismo; es un trastorno mental que manifiesta una profunda complejidad emocional. 

La psicóloga clínica Paola Cercado explica a Diario EXPRESO que la piromanía es un desorden mental caracterizado por una compulsión a iniciar incendios. "Las personas que padecen este trastorno suelen experimentar una tristeza profunda y una rabia intensa. El fuego se convierte en una vía para liberar estas emociones", menciona. 

La especialista destaca que el placer que sienten los pirómanos al provocar un incendio está intrínsecamente ligado al fuego mismo. A medida que el incendio crece, también lo hace su satisfacción.  "Si yo siento ira e incendio una botellita y la veo cómo se empieza a derretir, entonces empiezo a sentir placer", dice Cercado.

Esta compulsión puede comenzar en la infancia. "La mente es diversa, un mismo síntoma puede derivarse de muchas causas, puede ser traumática o de goce", argumenta por su parte la psicóloga Gloria Bermúdez. 

Para esta profesional los niños suelen mostrar un respeto natural hacia el fuego, pero eventos como el mal uso de pirotecnia durante las festividades en el mes de diciembre pueden cambiar esta relación. "Si se les permite jugar con fuego sin límites, pueden pasar dos cosas: o se genera una fobia o se desarrolla una atracción peligrosa", detalla Bermúdez.

Piromanía: Un ciclo en ascenso

La psicóloga Cercado indica que el camino hacia la piromanía generalmente comienza con acciones pequeñas. "No se inicia de repente con incendios masivos. Cuando son niños niños o adolescentes y tienen esta atracción por el fuego, empiezan encendiendo botellas, papeles, madera, y esto va incrementando porque siempre se necesita más. Hasta cuando ya nos damos cuenta pasa lo que ha sucedido en Quito".

"Con cada pequeño fuego, el nivel de placer experimentado puede aumentar, creando un ciclo de búsqueda de más intensidad", sostiene Bermúdez.

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¿Cómo son las personas pirómanas?

Las personas con tendencias pirómanas a menudo presentan comportamientos asociales y pueden exhibir agresividad hacia su entorno. "Es fundamental identificar estas señales para intervenir a tiempo", enfatiza la psicóloga Cercado.

"Claro que se puede detectar a un pirómano", ratifica por su parte la psicóloga Bermúdez, quien señala que un pirómano "está marcado por un trauma, que va a generar que esa experiencia vuelva una y otra vez".

¿Tiene solución la piromanía?

"Una persona pirómana que se trata puede sanarse", evalúa Bermúdez, quien agrega que un enfoque combinado de atención psiquiátrica y psicológica es crucial para tratar a estos individuos. 

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Asimismo, Cercado subraya que un pirómano "tiene una enfermedad mental y necesita ser intervenido con urgencia". Aconseja que se debe desde ahora buscar la prevención del mal uso del fuego, sobre todo con la cercanía de diciembre, donde "el uso de pirotecnia permite que se corra el riesgo de que se desencadenen más catástrofes como en la actualidad", concluye.

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