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La gobernación de Tungurahua fue tomada por segunda vez por los indígenas, pero en esta se quedarán hasta que termine el paro, aseguraron.

Indígenas de Ambato se tomaron por segunda ocasión la Gobernación de Tungurahua

“No nos moveremos, estamos en la casa del pueblo”

Lo alertaron y cumplieron. Manifestantes de las comunidades indígenas de la zona alta de Ambato se tomaron por segunda ocasión la Gobernación de Tungurahua. La primera fue el viernes 17 de junio, pero fueron desalojados un día después de manera pacífica por los policías.

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Sin embargo, desde las 13:00 del miércoles 22 de junio se empezaron a congregar desde Pilahuín, Santa Rosa, Pasa, San Fernando, Mogato, Chibuleo y otras, en el centro de Ambato, capital de Tungurahua.

Recorrieron por la avenida Cevallos hasta llegar por la calle Sucre e ingresar a la ‘casa del pueblo’, así la denominaron. Estaban con lanzas unas puntiagudas, otras tenían fierros incrustados o clavos, llevaron escudos elaborados con tanques de aluminio, bombos, trompetas y hasta las banderas del Ecuador y de la provincia. “Venimos en son de paz a tomarnos la casa del pueblo y de aquí no nos moveremos”, expresaron, al momento que empezaron a retirar las vallas que acordonaban todo el contorno de la casa patrimonial.

Los policías y militares no pusieron resistencia y tampoco se enfrentaron a los manifestantes. Ellos salieron y alrededor de 2 mil indígenas ingresaron hasta la gobernación.

“Nos repartiremos los tres pisos y se asignará a los respectivos pueblos de Tungurahua. Esta es la casa del pueblo y vamos a quedarnos hasta que se llegue a un verdadero acuerdo con el Gobierno”, recalcó el presidente del Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT), Segundo Poalacín.

MÁS SE SUMAN POR LA MARCHA POR LA PAZ

Mientras los indígenas se repartían el edificio de la Gobernación, en Ficoa se reunieron un grupo de habitantes para marchar por la paz. Salieron vestidos de blanco y en el trayecto pedían que termine el paro para trabajar de manera libre.

Esta es la tercera ocasión que en Ambato se organizan para pedir por la paz. “Estamos preocupados por lo que está pasando. Este es un llamado del pueblo para el pueblo y el sector indígena deponga actitudes, se llegue a un diálogo y el resultado sea para el bien de todos”, expresó Héctor Supe, dirigente barrial. (YIE)