Lasso: "La violencia carcelaria es una negativa herencia que debemos asumir"
El presidente de la República, Guillermo Lasso, avanzó este 24 de mayo que invertirán 1.200 millones de dólares en los próximos tres años para fortalecer a la Policía Nacional.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, desde que asumió el poder, ha decretado en varias ocasiones estados de emergencia para frenar la delincuencia y la criminalidad tanto dentro como fuera de las cárceles, la última a finales de abril en tres provincias del litoral donde se concentra la mayor proporción de homicidios.
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Leer más"Lo que hoy vivimos es una reacción ante una nueva actitud de la aplicación de la ley. En el pasado cedieron demasiado territorio al hampa", recalcó antes de manifestar que "la actitud de este Gobierno no va a cambiar: Vamos a enfrentar a las organizaciones criminales y a los narcotraficantes".
Para ello, avanzó que se invertirán 1.200 millones de dólares en los próximos tres años para fortalecer a la Policía Nacional.
De acuerdo con Lasso, en 2021 se desarticularon más de 1.350 bandas y se incautaron 231 toneladas de droga, "un récord histórico para Ecuador". Mientras que en lo que va de año ya son 85 toneladas, el triple de lo incautado el año anterior en el mismo período.
"HERENCIA NEGATIVA" EN CÁRCELES
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Leer másPor otra parte, advirtió que la violencia carcelaria es "una negativa herencia que debemos asumir" y que ha impulsado un nuevo modelo de gestión que integra seguridad y rehabilitación social.
En 2020 fueron 46 los presos fallecidos dentro de las cárceles ecuatorianas, pero en 2021 se registraron 316 en distintas matanzas, y este 2022 va camino de repetir una cifra similar al acumular 64 presos asesinados.
Lasso se convirtió hace un año en el primer conservador en asumir la Presidencia de Ecuador en dos décadas, despertando enorme expectativa en una nación que parecía con su elección decir adiós a una etapa dominada por el correísmo y su predecesor, Lenín Moreno.
Pese al logro en vacunación contra la covid-19, la creciente inseguridad ciudadana y una crisis carcelaria sin precedentes han empañado su gestión.
Si en julio de 2021 llegó a contar con un 74 % de la población que defendía su gestión como buena o muy buena, en abril pasado era de apenas el 30,82 %, según Perfiles de Opinión. Otro sondeo difundido el 20 de mayo por Click Report mostraba que un 71,8 % consideró malo su desempeño.