“Mil casas se derrocan en Manta”
La zona de Tarqui, en Manta, fue devastada por el terremoto. El alcalde Jorge Zambrano cuenta cómo está la situación, 46 días después del 16 de abril.
¿Cuántas viviendas van a ser derrocadas en Manta y cuánto se ha avanzado en este proceso?
Hace unos minutos firmé la orden mil para derrocamiento. Pero no es la última porque todavía hay inspecciones. Hasta ahora hemos derrocado 405 viviendas. Algo más del 40 % de lo que ya está en la lista.
¿Cuántas viviendas hay en la lista de afectadas?
Más de 1.300 viviendas están en esas condiciones, pero no es una lista definitiva porque aún hay mucha información que recabar; lugares que revisar.
¿Hay alguna evaluación sobre el monto de los daños sufridos?
La magnitud del problema es tan grande que no es tan fácil recabar la información, aunque hayan pasado 45 días del terremoto, peor los daños en la propiedad privada. Eso va a tomar tiempo. En el caso de la infraestructura de agua potable y alcantarillado sanitario y pluvial, hay sectores en los que se desacopló la tubería y hay que reconstruirla toda.
¿Cuánto demorará la recuperación total de los sistemas de agua potable y alcantarillado?
En la zona cero, que es el sector de Tarqui, estimamos que de año y medio a dos años nos va a tomar reinstalar los sistemas. También hay que reconstruir las calles, aceras, bordillos porque vamos a soterrar todo en esa zona. Pero primero hay que hacer los estudios de suelo.
¿Han estimado el costo de esa reconstrucción?
Estamos presentando los proyectos al Comité de Reconstrucción. Son aproximadamente 89 millones de dólares que requerimos para reparar servicios públicos afectados: agua potable y alcantarillado.
¿Cuáles son los planes para la construcción de viviendas?
Estamos trabajando con la comunidad para darles viviendas nuevas. La empresa privada nos ha donado algunas casas que se están entregando a las personas más afectadas, a través de un estudio social. El Gobierno central también va a construir unas 700 viviendas.
¿Tienen los terrenos?
Tenemos 150 hectáreas disponibles. Allí veníamos trabajando en el proyecto Mi primer lote, que era una promesa de campaña. Esos terrenos servirán para construir las viviendas de los damnificados.
¿Y los comerciantes?
A los más de 3.000 comerciantes que quedaron en la calle tenemos que reorganizarlos. Estamos trabajando en unos terrenos públicos y privados, en un proyecto de reasentamiento, pero hay que invertir en infraestructura, servicios básicos, alcantarillado, vías, pasos peatonales. Hay obras que deben hacerse en el corto plazo y para las que se requiere de mucho dinero.
