La libertad de Jorge Glas se analiza en un juzgado de Quito
La defensa del exvicepresidente sentenciado por corrupción buscará la unificación de penas y la prelibertad
El lunes 12 de diciembre, a las 15:00, la situación legal de Jorge Glas tendrá una resolución. Él solicitará a la jueza de Garantías Penitenciarias, Melissa Muñoz Sánchez, que unifique sus dos condenas de seis y ocho años de cárcel por los casos Odebrecht y Sobornos, respectivamente. Una vez que esto sea aceptado, el exvicepresidente podrá alegar un beneficio penitenciario como la prelibertad, pues ha cumplido cinco años de prisión, más del 50 % de las condenas.
La jueza Muñoz debe analizar si este beneficio se aplica en su caso y si cumple los requisitos como estar en un pabellón de mínima seguridad, haber dado muestras de rehabilitación y tener un trabajo y un lugar de residencia.
Por ello, en la audiencia, la autoridad ha solicitado la comparecencia del responsable del Centro de Rehabilitación Social Masculino Pichincha No. 2, “a fin de que sustente las condiciones subjetivas del reo conforme así lo determina el artículo 35 inciso tercero del Código de Ejecución de Penas y Rehabilitación Social”.
La diligencia se realizará en Unidad Judicial Especializada de Garantías Penitenciarias con sede en el Distrito Metropolitano de Quito, ubicado en el cuarto piso del Complejo Judicial Norte.
Actualmente Glas ya se encuentra en libertad gracias a una medida cautelar dictada por Emerson Curipallo, juez de Santo Domingo, quien ordenó que se presente los lunes en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil. Este juez también es conocido por liberar peligrosos delincuentes sentenciados por narcotráfico y asesinato.
