Lluvias en Ecuador: Responder y no prever es un “lujo” en invierno
Expertos observan poca acción de prevención en el país. Esto trae afectaciones económicas
Lloverá sobre inundado. El fuerte temporal que ‘abraza’ a Ecuador ha llevado a las autoridades a declarar en emergencia varias localidades del país. La más reciente fue Santa Rosa, en la provincia de El Oro, luego de que barrios enteros de esta localidad y Machala quedaran anegados por las inundaciones. Asimismo en Los Ríos, donde más de 300 familias han quedado damnificadas a causa del fuerte temporal. En Guayas, lo mismo. Las precipitaciones que han coincidido con altos niveles de marea y un servicio de alcantarillado obsoleto, según el alcalde electo de Guayaquil Aquiles Álvarez, también pasan factura. En la zona 8, Guayaquil, Durán y Samborondón, 112 entidades educativas han sido afectadas.
El invierno empeora la vialidad
Leer másCifras y datos que solo bosquejan las consecuencias de un invierno que no acaba y que advierte que llegará con más fuerza: “Se prevé que a partir de los últimos días de marzo y durante abril de 2023, exista un incremento en la frecuencia y la intensidad de lluvias en gran parte del territorio nacional, sobre todo en la región Litoral”, alertó el pasado 23 de marzo el Instituto de Meteorología e Hidrología (Inamhi). Un temporal que podría producir, según los especialistas del Instituto, episodios intensos de lluvia que puede provocar que los valores de lluvia mensual de abril de este año superen su promedio histórico.
La gestión del riesgo requiere mucha inversión; estos fondos no son un gasto.
Este escenario preocupa a la academia que refiere que, si bien es cierto, los gobiernos locales deben trabajar en acciones preventivas para reducir el impacto de fenómenos naturales, como el invierno, la realidad deja entrever que en la práctica no es así: “En el caso de los gobiernos locales estoy segura de que más del 50 % cuenta con unidades de gestión de riesgos. Sin embargo, la mayoría solo trabaja en componentes de respuesta cuando se presentan las situaciones de emergencia”, califica María del Pilar Cornejo, directora del Centro Internacional del Pacífico para la Reducción del Riesgo de Desastres de la Espol.
El temporal pone a prueba a los seguros para hogares
Leer másCornejo califica el ejercicio de ‘solo responder’ como un lujo, pues refiere que, a pesar de la gestión del riesgo que requiera inversión, los fondos que se usan al final no son un gasto. “Consideren que a nivel global por cada dólar invertido en gestión de riesgos se ahorra entre 4 y 15 dólares. Es decir, que es una inversión que tiene un alto retorno. Todos los sectores deben tener planes preventivos. Por ejemplo, para las vías de transporte, la agricultura, la salud humana, la pesca, la acuicultura, etc. No podemos darnos el lujo de solo responder, y que la crisis económica y social empeore”, señala Cornejo.
A la alerta de lluvias fuertes que podrían romper récords, se suma la posible llegada del fenómeno de El Niño a mitad del año. Así lo informó en un boletín la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica. Según los expertos, el evento natural llegará si el calentamiento de la atmósfera del Pacífico se mantiene en los próximos meses.
Guayaquil: ¿condenada a quedar bajo el agua en cada invierno?
Leer másAnte esto, la directora del Centro Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres de la Espol, María del Pilar Cornejo, señala la proyección de la Administración Oceánica como un punto a favor de la prevención, debido a que con esta data, los gobiernos locales y autoridades “tienen tiempo para empezar a generar planes y proyectos para enfrentar un fenómeno de El Niño; si es que su llegada se confirma después de mayo de 2023, cuando el invierno haya pasado la barrera estacional en los modelos de predicción”.