‘Space Oddity’: Cuando Bowie entro en la carrera espacial
Fue la canción justa en el momento oportuno. Publicada un 11 de julio de 1969, se la relaciona con la llegada del hombre a la Luna, pero su autor se inspiró sobre todo en ‘2001 A Space Odyssey’ de Stanley Kubrick.
Sólo cinco días antes de que el Apolo 11 despegara con destino a la Luna, David Bowie publicó Space Oddity, la canción que transformó su carrera musical, marcada desde entonces por una pasión por el espacio que mantuvo hasta el final de sus días.
En julio de 1969, Bowie era un joven de 22 años y rubia melena rizada que trataba de hacerse un hueco en la escena musical londinense. Por entonces ya había abandonado su apellido original —Jones—; había militado en un par de grupos que no alcanzaron el éxito; y había publicado un álbum titulado con su nombre, que tampoco triunfó.
Así que Space Oddity fue la canción justa en el momento oportuno. Se la relaciona con la llegada del hombre a la Luna, pero su autor se inspiró sobre todo en 2001: A Space Odyssey, que Stanley Kubrick había estrenado un año antes y que Bowie devoró bajo los efectos de algunas sustancias.
El protagonista de la canción, el comandante Tom, es un astronauta en una misión espacial fallida, que recuerda más a la tripulación de la película de Kubrick que a los miembros del Apolo 11.
Musicalmente, Space Oddity se salía de la onda folk rock que Bowie cultivaba hasta entonces. Era muy superior a cualquiera de las canciones que había publicado, con una estructura ambiciosa, buenos arreglos y un texto que conectaba con la carrera espacial que esos días mantenía al mundo en vilo.
El single en versión mono, publicado en el Reino Unido el 11 de julio de 1969, entró en las listas de éxitos. Incluso tuvo una versión en italiano, Ragazzo solo, ragazza sola. Y abrió el camino a la publicación en noviembre de un álbum con una gran compañía bajo la producción de Tony Visconti, quien colaboraría con Bowie hasta la muerte del músico en 2016.
El disco se abría con una versión ligeramente diferente de Space Oddity, en estéreo y un poco más larga de la original. El álbum, que se había publicado solo con el nombre de David Bowie, acabó adoptando el nombre de su canción estrella, que sería reeditada en 1975 y, entonces sí, alcanzó el número uno.
Esta versión de Space Oddity es la que mejor conoce el gran público y se toma generalmente como punto de partida para repasar los clásicos del gran camaleón del rock.
En aquel álbum de hace medio siglo no había más obras maestras que su tema central, pero se reconocen algunas ideas que Bowie desarrollaría en el futuro. Dos años después de ese viaje, su particular carrera espacial le llevó a Marte, con la monumental Life On Mars?, incluida en el álbum Hunky Dory.
Y luego se transformó en un alienígena llamado Ziggy Stardust, que visitó la Tierra acompañado por su banda, Las Estrellas de Marte. Juntos firmaron en 1973 uno de los álbumes fundamentales de la música moderna, con himnos siderales como Starman.
El comandante Tom de Space Oddity reapareció en 1980 para despedirse en Ashes to Ashes, otro clásico de Bowie, quien después recordaría a su personaje junto a los Pet Shop Boys en la remezcla de su tema Hallo Spaceboy.
Las referencias al espacio se mantuvieron en la obra de Bowie hasta el final. En el inquietante vídeo de Blackstar, la canción que dio título a su último álbum —publicado solo unas semanas antes de su muerte— puede verse el cadáver de un astronauta.
Bowie nunca dejó de mirar el cielo. Tras su muerte, el 10 de enero de 2016, su esposa, Iman, le escribió: “Vuela hacia las estrellas, mi querido David”.