Machala y Huaquillas, entre las ciudades más violentas
El Oro es la tercera provincia más insegura, detrás de Guayas y Esmeraldas. El crimen organizado se atribuye atentados. Dinamita estalla en un destacamento
Cada mes, un promedio de 23 personas muere de forma violenta en El Oro. En balaceras, en robos, víctimas de sicariatos, en riñas o en ajuste de cuentas.
La ola de violencia ha sumergido a los habitantes de la provincia a vivir intranquilos. En lo que va del año, allí se han cometido 229 crímenes. Significa 107 víctimas más que en el mismo período de 2021.
El viernes 14 de octubre, la Policía fue víctima de un atentado. Delincuentes colocaron artefactos explosivos y dejaron mensajes de intimidación. “Vamos a matar al coronel si no sueltan a mi gente, atte. Los Peches”, decía el escrito.Otro mensaje intimidatorio está firmado por Los Choneros.
Huaquillas: Dos asesinatos en menos de dos horas
Leer másJustamente, el jueves 13 de octubre, un día antes del ataque, la Policía y la Fiscalía realizaron un operativo en El Oro y detuvieron a 16 presuntos integrantes de Los Choneros.
Según la Policía, los detenidos en ese operativo eran sospechosos de extorsión con modalidad “vacunas”. Con amenazas exigían de $ 1.600 a $ 4.000 para no atentar contra las víctimas en Guayas, Manabí, Pichincha, El Oro y Sucumbíos.
El ataque al cuartel policial no es un acto aislado. El 10 de septiembre pasado, se dio una balacera en el centro comercial Oro Plaza, en Machala.
De acuerdo con la versión de testigos, dados a la Policía, una persona que se dirigía al mall para depositar una fuerte suma de dinero fue interceptada por seis delincuentes.
La víctima, quien se encontraba armada, reaccionó y como resultado dos de los atacantes murieron.
Jaime Estrada, comandante de Policía de El Oro, detalla que la violencia que sufre la provincia se enfoca, sobre todo, en Machala y en Huaquillas.
De las 229 muertes violentas, el 65 % ha ocurrido en las dos ciudades, en donde operan grupos delictivos dedicados al narco y microtráfico, tráfico de armas y de combustibles y redes de contrabando. Además, hay organizaciones delictivas que lavan dinero y otras que se dedican al sicariato.
El 16 de agosto, un profesor del colegio 9 de Octubre, de Machala, fue acribillado por desconocidos que se movilizaban en moto. El 30 de junio, un joven futbolista fue otra víctima de los sicarios. Recibió varios impactos de bala cuando salía de su casa, en esa urbe.
Los datos policiales indican que Machala es el noveno distrito más peligroso del país, por debajo de Durán, en Guayas.
El alcalde de Machala, Darío Macas, dice que faltan policías y los que están trabajando no tienen todos los insumos. “Les falta hasta la gasolina”.
La situación de Huaquillas no es diferente. En septiembre, los transeúntes hallaron dos cadáveres en plena vía pública. Estaban atados de manos y tenían un papel con la leyenda “Cartel La Nueva Generación Presente, la tropa del Infierno”.
Para la Gobernación de El Oro, la respuesta frente a esta ola de violencia es reforzar los anillos de seguridad en Huaquillas, “identificando y controlando los pasos clandestinos que se han extendido hasta Arenillas”, indica su plan de seguridad presentado en marzo. Otra acción que se propone para 2022 es crear la Unidad de Flagrancia para atender denuncias las 24 horas. Además, en la provincia ya están trabajando 1.000 elementos de las Fuerzas Armadas y 2 helicópteros.
Para Mario Pazmiño, exjefe de Inteligencia Militar, a este plan hay que sumar la investigación y desarticulación de los grupos criminales. “La impunidad es tierra fértil para que estas bandas sigan actuando. Hay que desarmarlas”.