Manta: Tres pescadores volvieron a casa luego de 48 horas sin saber de ellos
Habían salido el 22 de octubre a pescar y los esperaban el sábado 23 pero fueron encontrados el domingo
La angustia llegó a su fin. Lo que habían sido más de 48 horas de incertidumbre y temor por la suerte de tres pescadores manabitas, se convirtió en felicidad para los familiares y compañeros de estos, luego de que aparecieran sanos y salvos.
Ramón Conforme, de 55 años; Beiker Conforme, de 20; y Steven Cedeño, de 19, habían zarpado a trabajar en la embarcación 'Siempre Mi Beiker', el viernes 22 de octubre, desde la parroquia San Mateo, provincia de Manabí, pero su retorno al día siguiente, como estaba previsto, no se dio.
Una lancha que navegaba por la misma zona, al llegar a puerto, alertó a sus familiares que estos habían sido blanco de un ataque pirata. Desde ese momento empezó la preocupación y el martirio.
"Nos dijeron que en El Matal, cantón Jama, habían visto a la lancha pero que andaban otras personas robando motores. Además en ese sitio hubo un cruce de balas y hay pescadores heridos", relató un familiar que prefirió el anonimato.
Ante la angustia por la suerte de los tres trabajadores, cuatro lanchas se preparaban para salir en su búsqueda. Para ello recolectaron combustible, agua y alimentos no perecibles.
Las embarcaciones se aprestaban a salir cuando una llamada desde Los Arenales de Crucita (parroquia de Portoviejo) les devolvió el alma al cuerpo. "Están sanos y salvos, están vivos, eso es lo importante, ya vamos a traerlos a la tierra que los añora", dijo emocionado una allegada de los hombres de mar.
Hasta el momento se desconocen las razones o el percance por el cual los tres marineros estuvieron más de dos días sin llegar a casa. Aunque se presume que pudieron haber sido víctimas de piratas del mar.
'La vacuna'
Familiares de los pescadores extraviados aseguran que actualmente en las caletas pesqueras del Litoral ecuatoriano se maneja el llamado 'método de vacuna' por parte de organizaciones delictivas. Se trata del pago de dinero que exigen los buhoneros a pescadores para dejarlos navegar sin hacerles daño.
"A quienes no pagan les causan daño, son pagos mensuales que se dan", dijo uno de los trabajadores.
