
Mia Teran: “No pretendo convertirme en otra Karol G”
La actriz y cantante quiteña no solo viró el timón al género urbano sino que fichó en Colombia y trabajará con Andrés Cepeda.
Hace cuatro años, pasó de ser la hija de Juan Carlos Terán y Cristina Rodas, conocidos artistas nacionales, para labrarse un nombre por mérito propio. La quiteña Mía Terán no solo demostró tener madera para el canto, sino también para la actuación. En este momento está en un proceso de reinvención.
Así lo dejó en claro cuando la visitamos en un acogedor club de la capital para conversar con esta “roquera a morir”. Afirma que su apertura mental también incluye los diversos géneros musicales que hoy existen en la industria y con los que actualmente experimenta.
“No soy de las que se casa con un estilo en particular. Quiero explorar el flow del pop urbano que es lo de ahora y quiero saber cómo me va. Luego de tres años sin grabar tampoco pretendo convertirme en otra Karol G, pero deseo que la gente baile y además a mí me gusta, jamás haría algo que no me agrada, aunque esté de moda”, sostiene.
Su búsqueda pronto estará plasmada en un disco que está en proceso de producción. Aclara que su fuerte y poderosa voz se mantiene porque no renunciará a su esencia, sino que la adaptará para su propuesta que ya es trabajada entre Colombia y Ecuador y que será lanzada en los próximos meses.
Todo esto responde a una necesidad de su cuerpo que le pedía volver y hacer música. Durante el tiempo que permaneció alejada de los estudios de grabación no estuvo cruzada de brazos ni paseando por Dubái. Todo lo contrario, se volcó a su otra pasión que es la actuación.
En 2018 se trasladó a Bogotá, consiguió un mánager y estableció contactos que le permitieron audicionar en todas las televisoras colombianas como Caracol, RCN y Fox.
Su esfuerzo se vio compensando cuando fue convocada por el equipo de Bolívar, una lucha admirable, serie de Netflix. Mía personificará a una monja quiteña y le resultó un reto, pues su carácter es totalmente extrovertido y desenfadado.
Esta profesión no es nueva, pues ya se había puesto a órdenes de Víctor Arregui en 2013 para la película Rómpete una pata y de niña participó en la versión Club Disney, de Teleamazonas. “Estoy feliz porque ahora hablamos de algo internacional. Voy a estar entre Ecuador y Colombia dependiendo de las cosas que salgan”.
La buena noticia es que ha sido invitada para volver a la nación cafetera en los meses de septiembre y octubre para integrar el espectáculo Cepeda en tablas, del cantautor Andrés Cepeda.
“Seré una de sus cantantes de refuerzo en una temporada teatral. Es más que un concierto. Me tiene emocionada estar al lado de uno de los grandes y pisar los escenarios de Bogotá y Medellín. Espero aprender, ganar terreno y que se me abran las puertas”.
Hasta que eso suceda, está dichosa de haber actuado junto a su mamá, Cristina Rodas, en Hijas de su madre, una obra ideada por ambas, y escrita y dirigida por el dramaturgo Alejo Lalaleo.
“Las dos también estamos haciendo radio en un programa que se llama Mama mía que se transmite por Gitana 94.9 FM. Hablamos de diversos tópicos, ponemos música de nuestras generaciones”.
La intérprete de éxitos como Me voy, I want you e Insomnia comenta que fue muy divertido compartir con la mujer que la trajo al mundo y que ahora que no viven juntas, valora que cada una respete el espacio de la otra. “Es hermoso que tus padres te apoyen al ciento por ciento. Nací cantando y así me moriré. No todos tienen esa suerte. La actuación llegó después”.
En sus ratos libres, ya no duerme hasta tarde, ahora optó por el ejercicio, practica kick boxing y entrenamiento funcional. “Le agarré el gusto al deporte en Colombia y es necesario desfogar, si no me vuelvo loca (risas). Aprovecho muy bien el tiempo”.
De ‘one’ pimpón
Un olor: El jabón.
Un sabor: El chocolate.
Un perfume: Cinema.
Una actriz: Meryl Streep.
Un galán: Mario Casas.
Una novela: El clon.
Una serie: Sex and the city.
Un personaje: Manuela Sáenz.
El título de sus memorias: Un día a la vez.
Un género musical: Rock.
Un plato: La pizza.
Un defecto: La impaciencia.
Una cualidad: La generosidad.
Una manía: Su pelo.
Un lugar para volver: Las islas Maldivas.
Una ciudad: París.
Una frase: “Un día a la vez”.
Conócela
*Nació en Quito en 1993.
*Estudió teatro, canto y baile en la Academia Arte N 3.
*A los 17 años ingresó al Berklee College Music en Boston y luego estudió Teatro Musical en la New York Film Academy.
*Su primer disco, Me voy, fue grabado y mezclado en los estudios Paramount Recording Group (Los Ángeles) en 2015.