
Midnight cowboy, el rubio vaquero que hizo historia cumple 50 anos
El filme Vaquero de medianoche fue la primera película de calificación X en ganar un Óscar de la Academia.
Era la primera vez que la prostitución masculina era abordada tan abiertamente en una película. Sus protagonistas, John Voight (papá de Angelina Jolie) y Dustin Hoffman, la rompieron hace 50 años. El filme Midnight cowboy (Vaquero de medianoche) se alzó con el Óscar al mejor filme.
La cinta narra las peripecias de un muchacho tejano llamado Joe que llega a Nueva York, renunciando a su oficio de lavaplatos, en busca del sueño americano. Cree que solo le basta su pinta para triunfar y seduce a cuanta mujer se le pone en frente a cambio de dinero. Con el tiempo se da cuenta que el negocio de gigoló no es como se imaginaba.
En su camino, el ingenuo hombre se topa con Ratso, un timador (el que nunca falta), y termina cayendo víctima de sus argucias. Al verse el campesino en aprietos, pues su situación va de mal en peor, y sin conocer a nadie en la Capital del Mundo, no le queda otro remedio que retomar la relación con el embaucador de Ratso.
El filme que celebra sus bodas de oro también ganó estatuillas en las categorías Mejor director (John Schlesinger) y Mejor guion adaptado (Waldo Salt). En su momento fue el único largometraje con calificación X, por sus desnudos, que consiguió el Óscar como mejor película.
El drama humano no solo causó gran receptividad de público y crítica sino también su magistral banda sonora.
Dos melodías destacaron de este sórdido clásico del séptimo arte, el tema que da título a la producción de Jerome Hellman (esa armónica habla por sí sola) y Everybody’s talkin’ interpretada estupendamente por Harry Nilsson.
Esta envolvente canción llegó a las primeras posiciones de los charts de Estados Unidos, Europa y otras partes del mundo. Ocupó la sexta posición en la Billboard Hot 100. El single superó el millón de copias vendidas, y Nilsson recibió un Grammy como mejor intérprete pop masculino. Felizmente no sería un solista ‘one hit wonder’, pues dos años más tarde, la balada Without you lo consagraría como un ídolo del pop.