Millonario contrato tiñe de sospechas a Petroecuador

La Refinería de Esmeraldas tiene previsto contratar en marzo a 70 personas para que trabajen en sus instalaciones durante los próximos tres años.

La justificación técnica para licitar este servicio, por el que tiene previsto pagar $ 5,7 millones, es que la refinería opera las 24 horas del día y que los técnicos de nómina se cansan.

“Las jefaturas de mantenimiento actualmente deben cumplir con los trabajos solicitados y programados aumentando las horas de trabajo del personal… como consecuencia de la actividad excesiva de labores, (se) genera fatiga en el personal, provocando la disminución del rendimiento, cansancio y agotamiento total”. Eso es lo que señala la Intendencia de Mantenimiento de la Refinería de Esmeraldas, en un documento de cinco páginas, con fecha del 27 de septiembre de 2022.

Petroecuador impulsa esta contratación pese a que la Constitución prohíbe la tercerización. La carta magna señala que “la intermediación y servicios complementarios” vulneran los derechos de los trabajadores.

La licitación que realiza Petroecuador incluso va en contra del Decreto Ejecutivo 457 (antes Decreto 135), sobre la optimización del gasto público. Allí se establece, con claridad, que la empresa pública no puede realizar la contratación de personal de apoyo. Pese a estos impedimentos, el 10 de diciembre de 2022 la entidad inició el proceso LICS-EPP-049-2022, denominado ‘Servicio de apoyo para actividades de mantenimiento rutinario y emergente de la Refinería de Esmeraldas’. Indica que la forma de pago será por hora/hombre, por la provisión de personal. Y pide que la contratista tenga un reloj biométrico para contabilizar las horas trabajadas.

Sobre los objetivos que el nuevo personal deberá cumplir, en un documento de agosto de 2022 se explica que son labores de “apoyo para las actividades rutinarias de mantenimiento eléctrico”, “apoyo para las actividades del área de instrumentalización y automatización”, para el área de mecánica, calderería y “mantenimiento rutinario complementario”. No se determinan objetivos concretos, según los documentos publicados en el Servicio de Contratación Pública (Sercop).

Dos meses antes de que reportara el proceso en el Sercop, el 5 de octubre de 2022, Petroecuador solicitó un estudio de mercado y pidió a seis empresas que envíen sus proformas.

Cuatro firmas respondieron: Construcciones Benal (en 2005 se llamaba Tercerizadora Benal), Herón Consultores Inghercon, Vladmau Construcciones y Legadoil. Estas dos últimas compañías se han visto salpicadas por casos de corrupción.

Ramiro Carrillo, exgerente de transporte y almacenamiento de Petroecuador, fue sentenciado en 2018 a seis años de reclusión por el delito de asociación ilícita. La Fiscalía comprobó que recibió $ 160.000 en coimas de Odebrecht, pagadas a través de Vladmau. En ese juicio, Vladimir Sper, antiguo accionista de Vladmau, dijo que desconocía el origen del dinero.

En lo que respecta a Legadoil, Carlos Pareja Yannuzzelli, exgerente de Petroecuador, y los funcionarios Samuel Vernaza y Frankie Sierra fueron sentenciados en 2019 por el delito de tráfico de influencias, por “favorecer” contratos a la empresa Legadoil. El caso ahora está en casación.

Pese a estos antecedentes, Petroecuador insiste en incluir a estas compañías en sus procesos de contratación pública. De hecho, de las proformas enviadas, la que mejor precio ofrece es la de Legadoil, que cotizó sus servicios en $ 6,3 millones.

Este Diario solicitó entrevistas con la entidad pública, con Vladmau y Legadoil, pero hasta el cierre de esta edición no se han concretado.

Otro hecho que llama la atención es que se trata del segundo intento de Petroecuador de contratar personal. Ya en 2019, con Pablo Flores, exgerente procesado por delincuencia organizada, se quiso incorporar personal para la refinería. En ese entonces también participó Vladmau, pero esa vez el proceso se declaró desierto porque fueron inhabilitadas las ofertas presentadas.

En este segundo intento, la Contraloría solicita que antes de la adjudicación se presente un informe de pertinencia. En ese documento se pregunta si existe un proceso anterior declarado desierto. El 27 septiembre de 2022 la jefa de Contratos de Petroecuador, Narcisa Salvador, respondió que no, desconociendo el proceso SIE-EPP-2019113-20, en el que se solicitaba el mismo servicio, exactamente el mismo plazo y la misma forma de pago: “servicios prestados, previa presentación de planilla” y con control biométrico de horas.

En el portal del Sercop consta que el proceso de licitación sigue en marcha. Según el cronograma, las compañías interesadas tienen plazo para presentar ofertas hasta la medianoche de hoy viernes 3 de febrero de 2023.

• 5,7 millones pagará Petroecuador por 70 técnicos que laboren en la Refinería de Esmeraldas.