La ministra Romo llega al sector minero de Buenos Aires

Antes de las 10:00 de este miércoles 3 de julio, la ministra del Interior María Paula Romo llegó a la parroquia de La Merced de Buenos Aires. El helicóptero en el que arribó, aterrizó en la cancha deportiva del pueblo, donde desde el lunes 1 de julio están estacionadas motos y vehículos policiales. En el sitio se instalaron también 12 baterías sanitarias.

La ministra mantiene una reunión con autoridades policiales para recibir información de lo actuado entre martes y miércoles. La acción que involucra a cerca de 3.000 uniformados de Policía y Fuerzas Armadas se desarrolló sin mayores inconvenientes. La ministra dijo que no durará un día sino el tiempo necesario para estabilizar la zona en la que se activarán proyectos alternativos.

Reconoció que en un pueblo de 1.800 habitantes no se puede incorporar a esa realidad a más de 10.000 personas dedicadas a la minería ilegal.

Informó que unas 400 personas habrían ingresado en otro lado de las minas de Buenos Aires.

Antes de las 11:00, la ministra se desplazó a los sectores recuperados por policías y militares.

Policías de unidades de todo el país participan en el operativo. Camionetas todoterreno fueron requeridas para la acción policial y militar.

Hasta el control de la Y llegaron caminando cientos de ciudadanos que fueron registrados por la Policía. Habían caminado horas. “Volvemos derrotados a Venezuela”, dijo uno de los caminantes. Este miércoles, el flujo de las personas que salían era de casi 150 personas por hora, señaló el general Hernán Carrillo, director de Operaciones de la Policía. La ministra llegó a los tres sitios y los recorrió. Hoy miércoles, la mayor cantidad de personas provenía de las minas a las que ayer martes se les cortó el aprovisionamiento.

En las minas ya quedan pocas personas. Los que más se han quedado son los que tienen sus cosas, señaló una persona que vende las claves para el Internet. Habló de dos personas que habrían sido asesinadas y arrojadas a la quebrada.

La información se la proporcionó a agentes de inteligencia que consultaron sobre situación en las minas. El ciudadano dijo que tiene un hermano que permanece en el lugar y en cada mina están unas 100 personas en cada lugar. Les habló de los armados que atemorizaron el sector, les dijo que se trataba de gente armada que se enfrentaba entre ellos. Él proveerá de Internet a la Policía, mientras se encuentren en las minas y puedan tomar el control de la zona.

En las minas permanecen los armados y extorsionan a la gente. Amenazan con sus armas a los ciudadanos, según contó a la Policía.