Amnistía Internacional: "Nigeria no investigó desapariciones forzosas"
Amnistía Internacional presentó una demanda por las desapariciones
El Gobierno de Nigeria no investigó de manera efectiva la desaparición forzosa de miles de personas a manos de su Ejército en el noreste del país, denunció este 3 de noviembre Amnistía Internacional (AI), tras presentar una demanda el pasado mes ante un tribunal regional de África occidental.
"Al permitir que el Ejército llevara a cabo miles de desapariciones forzadas en el noreste del país y, posteriormente, no investigar ni procesar de manera genuina y efectiva a los responsables, el Gobierno nigeriano ha violado sus obligaciones regionales e internacionales con los derechos humanos", declaró en hoy en un comunicado el director de AI para Nigeria, Isa Sanusi.
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La organización lanzó este mensaje después de que el Gobierno nigeriano confirmara la recepción de la demanda presentada el pasado mes por la organización ante el Tribunal de Justicia de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao), un organismo con sede en ese país africano.
La demanda, que fue impulsada junto con la organización nigeriana Centro Sterling para el Derecho y el Desarrollo y con 23 víctimas y supervivientes de esos hechos, busca conseguir "justicia, verdad y reparaciones para los desaparecidos y sus familias", según AI.
Ahora, de acuerdo con la ONG, el acuse de recibo por parte del Gobierno nigeriano garantiza que se trata de "un caso pendiente" y que las víctimas comparecerán ante la corte.
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"El Tribunal de la Cedeao representa una de las pocas vías que quedan para la rendición de cuentas y la justicia para las víctimas (...) y sus familias, que merecen saber el destino y el paradero de sus seres queridos", aseveró Sanusi.
En 2015, esta organización reveló a través de un informe que las fuerzas de seguridad nigerianas cometieron crímenes de guerra y otras violaciones graves de derechos humanos durante las operaciones militares contra el grupo yihadista Boko Haram en el noreste del país.
Esa zona se ha visto golpeada por la violencia yihadista desde 2009, algo que se agudizó a partir de 2016 con la aparición de una escisión de Boko Haram, el llamado Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP).
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