Daniel Ortega arremete contra el Vaticano y llama "tirano" a Juan Pablo II
La Iglesia Católica de EE.UU. repudia la "persecución" religiosa en Nicaragua
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ha vuelto a arremeter contra la Iglesia católica y el Vaticano y calificado a San Juan Pablo II de "dictador" y "tirano", en un discurso televisado y enviado a la prensa este jueves 20 de abril de 2023 por el Gobierno de Managua.
Nicaragua firma acuerdos con China para generar energía y construir viviendas
Leer másEn su intervención, Ortega recordó la primera visita que hizo a Nicaragua el papa Juan Pablo II, el 4 de marzo de 1983, cuando el país centroamericano era gobernado por los sandinistas, y durante una misa ofrecida en una plaza de Managua tuvo que gritar "silencio" a simpatizantes del Gobierno que gritaban "queremos la paz", en medio de la eucaristía.
Según el mandatario, el papa se molestó por el grito "Queremos la paz" y porque las madres de sandinistas caídos en la guerra civil de esa década rogaron por una oración, pero no la recibieron. "No la hizo (la oración), más bien se molestó y gritó: silencio, como un buen dictador, como un buen tirano", lanzó Ortega.
El líder sandinista insinuó, sin presentar pruebas, que Juan Pablo II llegó en esa ocasión a Nicaragua "con la mentalidad totalmente alejada de la esencia de Cristo y del cristianismo, y venía manipulada por el Gobierno (estadounidense) de Ronald Reagan".
Karol Wojtyla, nombre de pila de Juan Pablo II, estuvo en Nicaragua por primera vez en marzo de 1983, y en esa ocasión, además de gritar "silencio" a las masas sandinistas, amonestó públicamente al poeta y sacerdote trapense fallecido Ernesto Cardenal, por mezclar la religión con la revolución.
Según el artículo testimonial "La vergonzosa encerrona de los sandinistas al Papa Juan Pablo II", del periodista Alberto García Marrder, quien cubrió esa visita papal a Nicaragua p "fue repudiable, vergonzoso, cruel y grotesco" lo que sufrió Su Santidad en la plaza.
Nicaragua cierra la Universidad Rubén Darío y ordena decomisar sus bienes
Leer más"Fue cuando turbas sandinistas profanaron una misa al aire libre del papa Juan Pablo II en el momento cumbre de la consagración", contó en su artículo.
Recordó que el papa, sorprendido por ese desafío a su autoridad, contestaba con la voz ya ronca: "La Iglesia también quiere la paz", pero que de nada servía, porque seguían los gritos.
"Su Santidad había enfurecido a las turbas cuando, saliéndose del discurso oficial y claramente refiriéndose al sandinismo, recordó el pasaje del Evangelio de San Mateo 7:15-27: "Cuídense de los falsos profetas. Se presentan con piel de cordero, pero por dentro son lobos feroces", relató García Marrder.
Nicaragua en 1983 vivía una guerra civil entre la "Contra", financiada por Estados Unidos, que combatía desde las montañas a los sandinistas, aliados de la extinta Unión Soviética y Cuba.
Para Ortega, San Juan Pablo II respondió a la multitud hace 40 años de una forma "nada cristiana".
Tras partir de Nicaragua, agregó el dirigente sandinista, se hizo "un escándalo mundial, diciendo que le habíamos faltado el respeto al papa por gritar que ¡Queremos la paz!".
Juan Pablo II visitó Nicaragua por segunda vez en febrero de 1996, cuando gobernaba Violeta Barrios de Chamorro (1990-1997), y en esa ocasión calificó de "gran noche oscura" su primera visita al país.
"Ahí tuvo otra expresión famosa que indicaba claramente su preferencia política, ideológica y no cristiana", comentó Ortega, en referencia a ese calificativo.
Nicaragua bloquea cuentas bancarias de sacerdote descendiente de Sandino
Leer másSobre el Vaticano, Ortega dijo que "es un Estado más en el mundo", que "se ha convertido en un Estado más, intervencionista, al servicio de los imperialistas de la Tierra", y los invitó a recapacitar.
"Ahí no hay democracia. Tiene un mando totalmente vertical, como lo ejercían los emperadores romanos. Igualito que como lo ejercían los emperadores romanos, igual que como lo hacía Nerón, Calígula", reprochó.
Las relaciones del Gobierno de Ortega y la Iglesia católica viven ahora momentos de gran tensión, marcadas por la expulsión y encarcelamiento de sacerdotes, o la prohibición de actividades religiosas.
El presidente Ortega ha llamado "mafia" a sacerdotes, obispos, cardenales y al papa Francisco, quien ha tildado de "dictadura grosera" al Gobierno sandinista en una reciente entrevista con Infobae, ha señalado "un desequilibrio de la persona que dirige" el país centroamericano.
La Iglesia Católica en Estados Unidos reprochó este jueves la "persecución" del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, contra la libertad religiosa y pidió al Gobierno estadounidense interceder por la liberación del obispo Rolando Álvarez.
El presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, David Malloy, exhortó al Gobierno de EE.UU. y a la comunidad internacional a bregar por la liberación de Álvarez y "la restauración de la paz y el imperio de la ley en Nicaragua".