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Varios ciudadanos denuncian fallos en las políticas migratorias de Trump.
Varios ciudadanos denuncian fallos en las políticas migratorias de Trump.Canva

Políticas migratorias de Trump: Pidieron 'autodeportación' a ciudadana estadounidense

Médica estadounidense recibió un correo erróneo para “autodeportarse”, revelando fallos en las políticas migratorias de Trump

Lisa Anderson, una doctora de 56 años nacida en Pensilvania y residente en Connecticut, vivió una pesadilla cuando el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) le envió un correo exigiéndole que se “autodeportede Estados Unidos, a pesar de ser ciudadana estadounidense por nacimiento. Este error, reportado por NBC Connecticut, pone en evidencia los problemas en las políticas migratorias de la administración de Donald Trump, que, en su afán de combatir la inmigración ilegal, están afectando a ciudadanos legales debido a fallos administrativos.

Un correo que sembró el pánico

Lisa Anderson recibió un correo que inicialmente pensó que era spam. El mensaje, descrito como “rudo” y “amenazante”, le ordenaba abandonar el país para evitar represalias legales, según relató a NBC Connecticut. Cómo médica sin antecedentes penales y ciudadana de nacimiento, el mensaje la dejó confundida. Tras contactar al DHS y al Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), las autoridades reconocieron que se trató de un error, atribuyéndolo a un posible uso fraudulento de su correo electrónico por parte de un extranjero, aunque no proporcionaron detalles claros. Anderson resolvió el malentendido presentando su pasaporte y acta de nacimiento, pero el incidente la marcó profundamente. “Ahora llevo mi pasaporte a todas partes”, confesó, reflejando el temor que este tipo de errores genera incluso en ciudadanos con derechos garantizados.

Políticas migratorias de Trump: Errores sistémicos

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La administración Trump, que asumió el poder en enero de 2025, ha intensificado las políticas migratorias con medidas como la revocatoria del TPS y la implementación de verificaciones automáticas de estatus migratorio. Sin embargo, el caso de Anderson revela fallos críticos en el sistema. ICE no tiene acceso a una base de datos nacional centralizada de ciudadanía, lo que dificulta la verificación inmediata del estatus legal, según un informe de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO). Este problema persiste en 2025, con sistemas que erróneamente marcan a ciudadanos como “extranjeros” debido a apellidos, vínculos familiares o errores burocráticos.

Entre 2016 y 2021, al menos 70 ciudadanos estadounidenses fueron deportados por errores similares, según el GAO. En 2024, el DHS procesó 1.5 millones de verificaciones de estatus, con un 1.8% de falsos positivos, según el Center for Immigration Studies. Estos fallos, exacerbados por las políticas de una “tolerancia cero” de Trump, han llevado a casos como el de Anderson, donde ciudadanos de nacimiento enfrentan amenazas injustificadas.

¿Puede un ciudadano estadounidense ser deportado?

Bajo la ley estadounidense, un ciudadano por nacimiento, como Anderson, tiene protección absoluta contra la deportación, según la 14ª Enmienda de la Constitución. Ni delitos ni circunstancias legales pueden revocarla, salvo una renuncia voluntaria a la ciudadanía, un trámite extremadamente raro. Sin embargo, errores como identificaciones falsas, confusiones con nombres similares o fallos en bases de datos pueden desencadenar notificaciones erróneas. Ciudadanos naturalizados, en cambio, pueden enfrentar deportación solo si se demuestra fraude en su naturalización o por delitos graves.

El caso de Anderson no es aislado. La ACLU reportó 12 incidentes similares en 2025, afectando principalmente a estadounidenses de origen latino o asiático. Posts en X destacan casos como el de una abogada en Texas que recibió una notificación parecida, reflejando un patrón de errores bajo las políticas actuales.

Impacto en el sistema y confianza ciudadana

El error contra Anderson, aunque corregido, dejó secuelas. El lenguaje del correo era tan agresivo que parecía falso, pero era oficial, expresó, criticando la falta de claridad del DHS. La ausencia de una disculpa formal y la explicación vaga sobre un “fallo técnico” han avivado la desconfianza.

El caso expone las fallas de un sistema migratorio que, en su rigor, afecta a quienes no debería. Mientras las políticas de Trump apuntan a indocumentados, los errores administrativos presentan temor entre ciudadanos legales, especialmente de minorías.

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