Supervivientes de cáncer buscan subir la cima del Pico de Orizaba

Mexicanos y franceses supervivientes de cáncer han escalado los Alpes como una forma de impulsar a quienes han superado la enfermedad y alentarlos a alcanzar sus sueños, por lo que ahora buscarán escalar en noviembre el Pico de Orizaba, la montaña más alta de México.

“Ha sido una travesía de autodescubrimiento y fortaleza interior. Cada paso que dimos hacia la cumbre fue un paso más allá de nuestras luchas contra el cáncer. Esperamos que nuestras experiencias inspiren a otros”, dijo a EFE David Hernández, sobreviviente de cáncer e integrante de la fundación Cimas de la Esperanza.

El joven de 29 años fue diagnosticado con osteosarcoma a los 17 años y un año después sufrió metástasis, por lo que le amputaron una de sus piernas y tuvo operaciones que lo pusieron al borde de la muerte.

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Tras superar el cáncer y pese a haber perdido una de sus extremidades, David buscó la manera de ayudar a otros y, junto con Mateo Dornier, empresario francés asentado en México, fundó Cimas de la Esperanza para ayudar a quienes han sobrevivido al cáncer y buscan retarse a sí mismos con experiencias como la escalada.

“Como superviviente de cáncer, el poder encontrar un proyecto como este, que ayuda a demostrar que hay vida después del cáncer, después de la enfermedad, que te ayude a reincorporarte a la sociedad, y más cuando adquieres una discapacidad, me pareció súper interesante”, señaló Hernández.

Apenas en julio pasado, un grupo de mexicanos, liderados por Hernández, acudieron a los Alpes franceses para celebrar la edición 29 de Cumbres de la Esperanza, un evento emblemático auspiciado por la asociación Semons l’Espoir, en el que también participaron supervivientes franceses.

Chamonix, la base del Mont Blanc en Francia, fue el escenario de esta travesía, donde cinco individuos forjaron una conexión basada en su voluntad de superar el obstáculo.

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“Llegamos a casi 4.000 metros de altura, fue una experiencia increíble, hicimos muchas amistades y logramos compartir esta experiencia con otros supervivientes, lo cual ha sido muy valioso”, destacó Hernández.

El 27 de julio, el grupo de más de una decena de supervivientes conquistó la cumbre de la Pirámide Vincent, una montaña en el macizo del monte Rosa.

Tras escalar los Alpes, los mexicanos regresaron al país con otro reto en mente: subir el Pico de Orizaba, el volcán más alto de Norteamérica, con 5.636 metros de altura.

Es una experiencia que ya vivieron en 2022 y que buscan replicar este año, pero ahora con supervivientes franceses que les acompañaron en la Pirámide Vincent.

“Vienen ellos a partir del 19 de noviembre para un programa de alta montaña. Todos vamos a subir el Pico de Orizaba, más de 15 supervivientes de cáncer en la cima, incluso hay dos o tres personas con muletas, pero así subirán”, explicó Hernández.

En México, el cáncer es la tercera causa de mortalidad, pero se estima que tres de cada 10 casos son prevenibles y seis de cada 10 casos diagnosticados a tiempo tienen probabilidad de curarse.

En el país, de acuerdo con cifras oficiales, mueren aproximadamente 90.000 personas anualmente a causa de esta neoplasia, y las de mayor malignidad e incidencia son el cáncer de mama, de próstata, cervicouterino, de colón y pulmón.

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