Trump calma conflicto militar con Irán
El presidente estadounidense aleja el conflicto militar con Irán, pero no convence al Congreso.
El presidente Donald Trump alejó este miércoles la posibilidad de un conflicto militar con Irán al retomar la vía de la presión económica, pero no logró convencer a un Congreso cada vez más dividido por su decisión de asesinar al general iraní Qasem Soleimaní.
Horas después de que Trump anunciara que había decidido imponer “inmediatamente” más sanciones a Irán en lugar de optar por una escalada militar, la Cámara de Representantes de EE.UU. programó un voto para este jueves destinado a limitar “las acciones militares” del mandatario respecto a Teherán.
Esta es la cronología de la tensión entre Estados Unidos e Irán
Leer másAdemás, una sesión informativa de altos cargos del Gobierno con legisladores dejó patente la creciente incomodidad de muchos representantes de ambos partidos respecto a la decisión de Trump de lanzar la operación contra Soleimaní sin consultar al Congreso.
Trump asegura que no hubo "bajas mortales" en ataque iraní
Leer másTRUMP OPTA POR LAS SANCIONES
En su esperado discurso en la Casa Blanca, Trump se mostró más conciliador de lo habitual con Irán, y disipó los temores de un conflicto abierto entre Washington y Teherán tras al asesinato de Soleimaní en un ataque aéreo estadounidense el pasado 3 de enero en Bagdad.
Un día después del ataque iraní contra dos bases donde había tropas del país en Irak, Trump destacó que no hubo “bajas mortales” ni de estadounidenses ni de iraquíes, y concluyó que Irán “parece estar conteniéndose”, por lo que decidió alejarse de la vía militar y volver a su estrategia habitual de presión económica.
“EE.UU. inmediatamente impondrá sanciones adicionales contra el régimen iraní”, dijo Trump en su declaración.
“Estados Unidos está preparado para abrazar la paz con todos aquellos que la buscan”, agregó el mandatario, que pidió a los firmantes del acuerdo nuclear de 2015 con Irán que rompan ese pacto.
IRÁN ATACÓ PARA MATAR, SEGÚN EL PENTÁGONO
Según muchos analistas, el ataque iraní a las bases aéreas en Irán pareció diseñado deliberadamente para no causar víctimas y permitir que Teherán presumiera de haber respondido al asesinato de Soleimaní sin alimentar una escalada militar con Estados Unidos.
Sin embargo, el jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., el general Mark Milley, dijo a los periodistas en el Congreso que, a su juicio, los misiles lanzados por Irán tenían el objetivo de “causar daños estructurales, destruir vehículos, equipos y aeronaves y matar al personal” que se encontraba en las bases.
“La razón por la que no hubo víctimas, según mi estimación y lo que sé, tiene más que ver con las técnicas defensivas que usan nuestros militares que con la intención” de Irán, apuntó Milley, quien precisó que once misiles impactaron en la base iraquí de Al Asad “cerca de personal y de equipos” y otro cayó en la de Erbil.
Ese análisis contrasta con el proporcionado al diario The Washington Post por fuentes de la Casa Blanca, según las cuales Irán, a través de Irak, comunicó a EE.UU. que planeaba atacar esas bases horas antes de hacerlo, lo que permitió poner a salvo a las tropas estadounidenses.
Aunque Trump describió los daños materiales como “mínimos”, imágenes por satélite captadas por la empresa estadounidense Planet y proporcionadas a Efe mostraron un impacto significativo en edificios de la base aérea Al Asad, en el oeste de Irak.
INDIGNACIÓN EN EL CONGRESO
Tras el discurso de Trump, Milley acudió al Congreso junto a los secretarios de Defensa, Mark Esper; y de Estado, Mike Pompeo; para explicar a los legisladores por qué el Gobierno lanzó el ataque contra Soleimaní, que según la Casa Blanca planeaba un ataque inminente contra tropas y diplomáticos estadounidenses.
“Es la peor sesión informativa en la que he estado, al menos en temas militares, en los nueve años que llevo en el Senado”, dijo después el senador republicano Mike Lee, quien se quejó de que los miembros del gabinete de Trump les pidieron no cuestionar sus decisiones porque eso “envalentonaría” a Irán.
“Me parece algo insultante y denigrante para con el cargo de los cien senadores, y respecto a la Constitución”, agregó.
El también republicano Rand Paul coincidió en que la sesión fue “poco satisfactoria”, mientras que la congresista demócrata Pramila Jayapal aseguró que no les presentaron “pruebas concretas” de que Soleimaní planteara una “amenaza inminente” para EE.UU.
Esa incomodidad en el Congreso promete quedar patente en la votación programada para este jueves en la Cámara Baja, que podría aprobar una resolución para limitar “las acciones militares” de Trump respecto a Irán.
El documento exige que, en caso de ataque y “si no hay medidas tomadas por parte del Congreso, las hostilidades militares de la Administración respecto a Irán cesen en 30 días”, explicó en un comunicado la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi.