Rey. Bandas brillantes de plasma en el Sol que se conectan de una región activa a otra, en una toma este mes.

La NASA se lanzara a la ‘conquista’ del Sol

Una nueva misión de la NASA se propone acercarse al Sol más de lo que hasta ahora lo ha hecho ninguna nave, con el objetivo de revelar cómo están hechas las estrellas, dijo ayer la agencia espacial estadounidense.

Una nueva misión de la NASA se propone acercarse al Sol más de lo que hasta ahora lo ha hecho ninguna nave, con el objetivo de revelar cómo están hechas las estrellas, dijo ayer la agencia espacial estadounidense. `

Después de despegar del Centro Espacial Kennedy en Florida en julio de 2018, la Sonda Solar Parker se convertirá en la primera en volar directamente hacia la atmósfera solar, conocida como corona.

El plan para la nave espacial no tripulada es orbitar el astro brillante a una distancia de 6,3 millones de kilómetros de su superficie.

La temperatura en esa región supera los 1.377 grados centígrados, por lo que la sonda está equipada con un escudo de carbono de 11,43 centímetros de espesor.

La nave medirá las ondas de plasma y las partículas de alta energía, y llevará equipos para captar imágenes de luz blanca de las estructuras a través de las cuales está volando, según Nicola Fox, científica del proyecto de la misión en el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins en Laurel, Maryland.

“Pasaremos muy cerca de él”, dijo en un evento en Chicago para anunciar la misión, que la NASA considera prometedora para ofrecer las observaciones más cercanas de una estrella que puede obtener en este momento la humanidad.

“Puedes aprender mucho mirando por la ventana”, dijo Fox. “Puedes ver que el Sol está brillando, que los pájaros están cantando, pero hasta que no sales realmente no tienes idea de lo caluroso que está ahí afuera, de cuánto viento hay o de cuáles son las condiciones”, expresó.

“Creo que hemos llegado lo más lejos posible mirando y ahora es el momento de subir y hacerle una visita” al Sol, agregó.

Inicialmente llamada Sonda Solar Plus, la misión fue rebautizada en honor al astrofísico Eugene Parker, de 89 años, profesor emérito de la Universidad de Chicago.

Una ventana de lanzamiento de 20 días para el despegue de la sonda en un cohete Delta IV Heavy se abrirá el 31 de julio de 2018.

El estudio del Sol y los vientos solares es de vital importancia para establecer sistemas de alerta temprana a tormentas solares capaces de interrumpir sistemas de satélites o incluso provocar apagones.

Varias sondas lanzadas desde los años 60 han confirmado las teorías sobre el campo magnético del Sol y la existencia de vientos solares, y han permitido observar el comportamiento de la corona solar, que alcanza temperaturas más altas que la superficie solar, algo que los científicos no entienden de manera completa.

Hito

La misión, un periplo infernal

Eugene Parker, el astrofísico en cuyo honor se rebautizó la sonda, por sus aportes al estudio del comportamiento del Sol, estuvo ayer presente en el anuncio realizado desde la Universidad de Chicago, y subrayó que esta misión es un hito “heroico” que hasta hace poco era impensable, debido a las masivas cantidades de radiación, temperaturas y velocidades a las que se verá sometido el delicado equipo de medición. Es la primera vez que una misión lleva el nombre de un científico aún vivo.