Trabajar de noche podria ser cancerigeno
Es la conclusión a la que llegaron científicos de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (Iarc).
El organismo de los seres humanos está preparado para trabajar de día y descansar de noche. Por este motivo, cuando se labora en estos horarios de forma continua o permanente, la persona sufre una alteración de su ritmo circadiano (de los patrones luz-oscuridad) haciéndolo sensible a sufrir, entre otras afecciones, de ciertos tipos de cáncer como el de mama. Señala un estudio realizado por 27 científicos de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (Iarc), entidad que es parte de la OMS.
Se estima que 1 de cada 5 trabajadores en todo el mundo se dedican al trabajo nocturno. Los más comunes incluyen los sectores de atención médica, manufactura, transporte, venta minorista y servicios.
Establecer hasta qué punto esa variación del ritmo circadiano es la causa de cáncer de seno, próstata o colorrectal no ha sido fácil porque el problema también tiene que ver con otras variables como el estilo de vida y factores ambientales.
En el reporte, cuyas principales conclusiones fueron recogidas en un editorial de la revista The Lancet, el grupo consideró que “hay pruebas concretas, tanto en humanos como en animales de experimentación, de que la alteración en el horario claro-oscuro da como resultado cambios en la melatonina sérica y en la expresión de los genes circadianos centrales, lo que, a largo plazo, aumenta la aparición de tumores malignos”.
Este estudio de la Iarc se suma a otros en los que ya se ha alertado sobre los efectos que tiene en el organismo laborar por la noche. Además del riesgo de cáncer puede originar afecciones como hipertensión e hipercolesterolemia, lo que a su vez incrementa el riesgo de sufrir cardiopatías.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que un trabajador envejecerá prematuramente cinco años por cada 15 años que permanezca en horario de labores nocturno. Aunque los problemas de salud no se empiecen a manifestar hasta después de cinco o 10 años de actividades, la disminución del rendimiento del trabajador a consecuencia de la fatiga acumulada por la inadaptación al horario, son más fáciles de detectar.