El nuevo bono para familias en extrema pobreza tiene restricciones y condiciones
El pago será de 240 dólares y se realizará una sola vez. El MIES debe localizar a los beneficiarios
Otra ayuda estatal está lista para atender a la población vulnerable. El gobierno emitió, la noche del jueves 24 de septiembre de 2020, un nuevo decreto para la creación de un bono de alimentación especial para las familias que están en la pobreza y extrema pobreza de los cantones más afectados por la emergencia sanitaria derivada de la propagación del COVID-19.
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Leer másEl Decreto Ejecutivo 1157 establece la creación del Bono de Apoyo Nutricional. Una transferencia monetaria de 240 dólares que se entregará por una sola vez, y con el carácter de emergente, a las familias mencionadas.
Según el documento presidencial, el objetivo de la entrega completa de 240 dólares es que la población más afectada por la crisis económica derivada de la pandemia tenga acceso a la compra de alimentos. Claro que, hay ciertas restricciones.
La más importante es que quienes accedan al Bono de Apoyo Nutricional no podrán ser parte de otras bonificaciones y subvenciones que entrega mensualmente el gobierno de Lenín Moreno.
La ayuda está dirigida a quienes sean usuarios de los servicios de los “Centros de Desarrollo Infantil (CDI), Creciendo con Nuestros Hijos (CNH) y Círculos de Cuidado, Recreación y Aprendizaje (CCRA) del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES)”. Todos si están ubicados en los cantones con más contagios de coronavirus.
El decreto no aclara, sin embargo, cuál es el estimado monetario que se dedicará a la subvención ni a cuántas personas beneficiará. De esos detalles debe encargarse el Ministerio de Inclusión Económica y Social, que también estará a cargo de ejecutar las transferencias.
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Leer másEl dinero saldrá del Ministerio de Economía y Finanzas. El decreto establece que esa cartera de Estado, que dirige Richard Martínez, debe asignar los recursos necesarios que sean solicitados por el MIES.
La noche del jueves, el gobierno emitió tres decretos ejecutivos que causaron reacciones en varios sectores. A la propuesta de la creación de un nuevo bono social se sumó la liberación del precio de los combustibles para el sector industrial por medio de la apertura de las importaciones de derivados -que deberá ser ejecutado por el Ministerio de Energía y Recursos Naturales no Renovables-. También se emitió el Decreto Ejecutivo 1159 que reforma la creación de un comité Coordinador de Gestión Delegada. Dicha entidad, que estará conformada por el presidente de la República, el ministro de Economía y el ministro de Producción, deberá impulsar proyectos que requieran financiamiento externo.