Nuevos cortes de luz Ecuador: ¿Por qué no se reducen las horas de los apagones?

Los ciudadanos de las 23 provincias del Ecuador que conviven a diario con los cortes de luz desde el pasado 23 de septiembre  -en Galápagos no se ejecuta esta medida- no tendrán una reducción en los horarios de los nuevos apagones programados para este fin de semana, del viernes 29 de noviembre al domingo 1 de diciembre.

Los horarios de cortes de luz en Ecuador se mantienen entre 6 y 7 horas diarias. Ante ello, los ciudadanos siguen cuestionándose por qué el gobierno de Daniel Noboa no ha podido reducir los racionamientos del suministro eléctrico, especialmente tras las promesas de que esta crisis terminaría en diciembre de 2024.

Según un comunicado oficial emitido por el Ministerio de Energía y Minas, los cortes de luz seguirán bajo el mismo esquema horario hasta nuevo aviso. Estas interrupciones se aplican en coordinación con las empresas distribuidoras y el Operador Nacional de Electricidad (CENACE), y buscan garantizar la generación eléctrica ante las limitaciones actuales del sistema energético del país.

El anuncio no ha logrado despejar la incertidumbre que afecta a la población, especialmente cuando el presidente Daniel Noboa prometió que los apagones terminarían en diciembre y que los ciudadanos volverían a una "vida normal". Esta declaración fue ratificada por la ministra encargada de Energía, Inés Manzano, quien destacó que el gobierno está trabajando arduamente para cumplir este objetivo.

¿Por qué se mantiene la misma cantidad de horas sin luz?

Varios expertos del sector eléctrico han expresado dudas sobre el cumplimiento de la promesa del presidente Noboa, ante dos escenarios que explicarían el porqué no disminuyen las horas de cortes de luz en el país:

1. Las condiciones hidrológica del país no han mejorado (persiste la sequía)
2.  Los motogeneradores para las centrales termoeléctricas Salitral (en Guayaquil), Quevedo y Esmeraldas - contratados en agosto de 2024- aún no comienzan a operar.

La crisis energética que atraviesa Ecuador es el resultado de varios factores, siendo uno de los más críticos la dependencia de las lluvias para generar electricidad. Al prolongarse el estiaje, el país se ha visto azotado por la sequía más grave de las últimas seis décadas, según el Gobierno Nacional, que como consecuencia ha mermado la capacidad de las hidroeléctricas, que son responsables de generar la mayor parte de la electricidad en el país.

Este problema ha generado un déficit de energía eléctrica, que tras la contratación de la barcaza turca y la compra de energía a Colombia, actualmente bordea los 1 000 megavatios (MW). El gobierno de Daniel Noboa ha apostado por la contratación de energía termoeléctrica para combatir la crisis; sin embargo, estas nuevas fuentes -que aportarían 241 MW adicionales- no están en funcionamiento debido a atrasos de los contratistas.

Este conjunto de factores han dejado al sistema energético en una situación altamente vulnerable. Quienes 'pagan la factura' de estas acciones son los ciudadanos, quienes se han visto obligados a adaptarse a largas horas sin electricidad, lo que ha afectado tanto a la vida cotidiana como a la productividad de sus negocios o empresas.

La promesa del gobierno de poner fin a los apagones en diciembre es vista con escepticismo por algunos expertos, quienes advierten -como ha reportado anteriormente EXPRESO- que la crisis energética continuará en enero de 2025, con altas posibilidades de extenderse en los siguientes meses.

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