Nuevos nombres, nuevas interrogantes
La última convocatoria de Hernán Darío Gómez se divide entre sorpresas y cuestionamientos por la ausencia de varios tricolores en buen momento.
¿Por qué John Narváez y no Robert Arboleda? ¿Por qué Juan Carlos Paredes y no José ‘Choclo’ Quintero? ¿Por qué Carlos Gruezo y no Fernando Gaibor o Juan Cazares? Las interrogantes que ayer aparecían en el seno de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) parecían interminables y, a la par, otros trataban de encontrar una explicación al llamado de Leonardo Campana y Jackson Corozo, campeones del último Sudamericano Sub-20 en Chile.
Guste o no, Hernán Darío Gómez presentó su lista para los amistosos ante Estados Unidos y Honduras, y tuvo una respuesta contundente, pero sin polemizar, sobre estas dudas: “Los especialistas (en el fútbol) somos nosotros; ustedes, en lo suyo de prensa, donde dan conceptos; pero nosotros trataremos de equivocarnos lo menos posible y que interpreten que ese estilo nos llevó a Mundiales. Esta es una selección en pleno trabajo y en la eliminatoria entrarán unos y saldrán otros”, dijo.
En su mensaje explico que, para él, estas convocatorias sirven para conocer nuevos futbolistas y gracias a esa decena de valores que probó, podrá saber con quiénes puede contar para un torneo corto, como la Copa América, y uno más largo, como la eliminatoria a la Copa del Mundo de Catar 2022.
La llegada de Campana y Corozo responden a algo natural, una formación de prospectos. “No son jugadores que nos van a salvar, deben seguir un proceso y llevarlos de a poco”, argumentó el DT de la Tri.
La vuelta de Toño Valencia parece más un espaldarazo de confianza (luego de su salida del United tras 10 años en el club) que para utilizarlo en el campo. “Le he dado la importancia” necesaria, reconoció el Bolillo, ratificando su rol como líder en el trabajo del estratega colombiano fuera del terreno.
Indicó que no llamó a Christian Noboa porque recién se recuperó de una lesión y espera que tenga más partidos (situación similar a la de Toño) y no descarta llamarlo a él y a Felipe Caicedo (de gran presente en la Lazio) para los choques que disputará la Tri en mayo.
Lo de Narváez y Gruezo pasa más por gustos que por merecimientos. Ambos tienen continuidad, al igual que los otros jugadores con los que se les compara (Arboleda, Gaibor y Cazares).
Están también las novedades que no se refutaron: Ángel Mena, indiscutible, que “se metió solo” comentó el Bolillo. Al igual que el llamado de Johan Julio, de Liga (Q), quien según el cafetero “corre los 90 minutos, defiende y ataca con velocidad. Tiene las condiciones que necesita un DT actual”.
Mientras el mundo futbolero de Ecuador juega a ser entrenador, el Bolillo amplía el abanico de opciones para esta nueva selección, que irá a la Copa América “para llegar los más lejos posible”, pero que no se desvía del “principal objetivo”: lograr el pase al Mundial en Catar.