El número de mujeres periodistas en Afganistán se reduce un 18 % en 6 meses

La ONG Comité para la Seguridad de los Periodistas Afganos (AJSC) denunció este lunes que el número de mujeres periodistas y otras profesionales de los medios de comunicación se ha reducido en un 18 % en seis meses, debido a la creciente violencia y a problemas financieros.

Entre abril y septiembre del año pasado había 1.678 mujeres trabajando en los medios frente a las 1.377 actuales, según un informe de la AJSC publicado con motivo del Día Internacional de la Mujer, realizado en las 34 provincias del país asiático y en el que participaron el 90 % de las compañías de comunicación.

Según datos de la organización, de las 1.377 mujeres que trabajan actualmente en medios de comunicación afganos solo 321 son periodistas, mientras que el resto trabajan en varios departamentos.

La encuesta muestra además que el número de empleadas en los medios de comunicación se reduce drásticamente en las áreas rurales en comparación con las urbanas, con Kabul como la ciudad que alberga a más profesionales junto a la provincia occidental de Herat y la norteña Balkh.

Cinco regiones marcadas por la inseguridad, como Nuristan o Paktia, no cuentan con ninguna mujer empleada en los medios de difusión.

Según el órgano de vigilancia de los medios, solo en los últimos tres meses cuatro presentadoras y periodistas han muerto en ataques directos.

"Estas cuatro mujeres trabajaban para Enikass RTV en la (provincia) oriental de Nangarhar", dijo a Efe la portavoz de AJSC Wahida Faizi, una región conservadora con presencia activa tanto de los talibanes como del grupo yihadista Estado Islámico.

Tres presentadoras murieron el pasado martes 2 de marzo en dos ataques distintos en la capital provincial de Jalalabad y la cuarta murió el pasado diciembre, mientras el país sufre en los últimos meses una ola de asesinatos selectivos contra periodistas, intelectuales, activistas y políticos.

Estos ataques han desatado el temor entre todos los trabajadores de los medios de comunicación, pero su efecto se ha dejado notar especialmente entre las mujeres de la provincia de Nangarhar.

"Todas las trabajadoras de Enikass RTV han abandonado sus trabajos por ahora y han sido enviadas a sus hogares por la televisión, y seguirán en sus casas hasta que la situación de seguridad mejore", dijo a Efe un reportero del canal, Jawid Razmand.

"Si los asesinatos colectivos y la situación actual continúan, estoy segura de que el número de mujeres empleadas en medios de comunicación se reducirá incluso más", concluyó Faizi, al expresar la "profunda preocupación" de la AJSC.